Una impactante lesión uvo el jugador de Países Bajos, Ion Nicolaescu del equipo de Heerenveen, tras sonarse la nariz durante un partido contra los Quick Boys.

Pese a este extraño momento, el futbolista no comprendió en primera instancia qué le había ocurrido, sino que más bien se cubrió el rostro con las manos por la incomodidad del momento.

Gracias a las cámaras del partido se logró captar el momento en que Nicolaescu se presionó su fosa nasal derecha e instantáneamente su globo ocular salió de su órbita, viéndose desde afuera como una gran protuberancia en su párpado.

Esta situación generó gran preocupación entre los presentes y es que la fuerte imagen fue captada en primer plano por la transmisión del partido, causándole incomodidad al afectado.

De acuerdo con expertos, esta situación podría haberse provocado en respuesta a que momentos antes el jugador había recibido un golpe en su ojo derecho tras chocar con un jugador del equipo rival.

Se explicó que lo ocurrido se debería a que, "al sonarse la nariz, el aire habría sido empujado hacia arriba, provocando la inflamación instantánea del párpado y el desplazamiento del ojo".

A pesar de los esfuerzos médicos durante el partido, no lograron recolocar el ojo en su posición original. Ante la situación, el entrenador Robin Van Persie decidió retirar al jugador del campo de juego.

El Heerenveen aún no ha emitido un comunicado oficial sobre el estado del delantero ni ha proporcionado detalles médicos sobre la lesión. La incertidumbre sigue rondando en torno al futuro inmediato de Nicolaescu, mientras se espera más información sobre su recuperación.