La Guardia Costera de EEUU anunció este jueves que los cinco tripulantes del submarino que se dirigía al Titanic han fallecido. Después de que un robot localizara un campo de escombros esta mañana, los guardacostas confirmaron que se trata de los restos del Titán tras sufrir "una implosión catastrófica".
Los restos del aparato fueron encontrados por un vehículo dirigido por control remoto (ROV) operado por el buque canadiense Horizon Arctic y posteriormente expertos determinaron que "son consistentes con una implosión catastrófica", es decir, una rotura y hundimiento provocados por la mayor presión del exterior."Tras esta determinación, notificamos de inmediato a las familias en nombre de la Guardia Costera de los Estados Unidos y todo el comando unificado. Ofrezco mis más profundas condolencias a las familias", apuntó el contralmirante John Mauger, de la Guardia Costera.
Según precisó el experto submarino Paul Hanken, se encontraron "cinco piezas principales" que reconocieron como "restos del Titán". Lo primero que se encontró fue "el cono de la nariz, que estaba fuera de la sala de presión".
"Encontramos la campana de la parte delantera de la sala de presión y este fue el primer indicio de que hubo un evento catastrófico poco después", precisó.
La empresa dueña del sumergible que desapareció hace cuatro días, OceanGate, había informado minutos antes del fallecimiento de los tripulantes.
A través de un comunicado distribuido a medios, la compañía dijo: "Ahora creemos que nuestro CEO Stockton Rush, Shahzada Dawood y su hijo Suleman Dawood, Hamish Harding y Paul-Henri Nargeolet, lamentablemente se han perdido".
Esta misma mañana la Guardia Costera de EE.UU. había informado a través de redes sociales que había encontrado unos "un campo de escombros dentro del área de búsqueda cerca del Titanic", que se encuentra a una profundidad de unos 3.800 metros.
En la búsqueda participaron efectivos y recursos de EE.UU., Canadá, Francia y el Reino Unido, con aviones, embarcaciones y drones submarinos.