Un refugiado sirio armado con un cuchillo sembró el terror este jueves en un parque de Annecy, en los Alpes franceses, donde hirió a seis personas, entre ellas cuatro niños de entre 22 y 36 meses, antes de ser detenido.
Este "ataque absolutamente cobarde" y que dejó "varios niños y un adulto entre la vida y la muerte", en palabras del presidente francés, Emmanuel Macron, conmocionó Francia y generó muestras de solidaridad en Europa.
El agresor, Abdalmasih H., era un refugiado sirio que había obtenido protección en Suecia en 2013, donde vivió durante 10 años, y que a finales de 2022 se trasladó a Francia, donde solicitó el asilo en noviembre, según varias fuentes.
La justicia abrió una investigación por intentos de asesinato, al descartar por ahora el "móvil terrorista", dijo la fiscal de Annecy, Line Bonnet-Mathis, precisando que el agresor no actuó bajo los efectos de las drogas ni el alcohol.
La primera ministra francesa, Élisabeth Borne, que viajó a esta turística ciudad de unos 140.000 habitantes en los Alpes, aseguró además que el hombre carecía de antecedentes judiciales o psiquiátricos conocidos.
En Francia, se encontraba en situación legal. Su expareja en Suecia, con la que tenía un hija de tres años, aseguró a AFP que se marchó porque no obtuvo la nacionalidad sueca y que hace cuatro meses le dijo que vivía "en una iglesia" en Francia.
El agresor dijo "en nombre de Jesucristo" en inglés cuando atacó, según un video consultado por AFP. Cuando fue detenido, portaba una cruz y, en su expediente de solicitud de asilo, se declaró como "cristiano de Siria", informó una fuente policial.