Al menos 11 empleados de la Organización de Naciones Unidas han muerto en los ataques aéreos de Israel sobre Gaza desde el fin de semana, informó la ONU este miércoles. Además, hizo un llamado a ayuda económica de emergencia para continuar el trabajo humanitario en el asediado enclave palestino.

El secretario general Antonio Guterres declaró que los funcionarios de la ONU que perdieron la vida pagaron "el precio máximo" en una breve declaración a la prensa.

Entre los fallecidos se encuentran cinco profesores, una ginecóloga, un ingeniero, un consejero psicológico y tres miembros del personal de apoyo, según Jenifer Austin, directora adjunta de la Agencia de Naciones Unidas para la Población Refugiada de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés) en Gaza, quien añadió que algunos fueron "asesinados en sus hogares con sus familias".

La organización también informó que treinta estudiantes de escuelas de la ONU perdieron la vida.

Gaza ha sido golpeada por ataques aéreos israelíes durante varios días, en respuesta a la ofensiva sorpresa lanzada por Hamas durante el fin de semana, que causó la muerte de al menos 1.200 personas en Israel.

Las Fuerzas de Defensa de Israel afirman que están atacando a Hamas, que controla el enclave costero. Sin embargo, la densa población de Gaza, en donde 2 millones de personas viven en 362 km cuadrados, significa que a menudo los civiles quedan atrapados en el fuego cruzado. Según las autoridades de salud palestinas, hasta el momento los ataques aéreos han cobrado la vida de 1.200 personas en Gaza.

El aumento de las preocupaciones humanitarias se debe a la orden del gobierno de Israel de un "asedio total" sobre Gaza, con bloqueo del acceso a la electricidad, alimentos, combustible y agua. La única central eléctrica de la zona se quedó sin combustible este miércoles.

Funcionarios de EE.UU. e Israel trabajan para establecer un posible corredor humanitario que permita a los civiles salir y suministros humanitarios ingresar, un paso que la ONU considera ya atrasado.

"Suministros cruciales para salvar vidas, incluyendo combustible, alimentos y agua, deben ser permitidos en Gaza. Necesitamos un acceso humanitario rápido e ininterrumpido en este momento", dijo Guterres.

Mientras tanto, los funcionarios de la ONU están trabajando día y noche, ya que docenas de escuelas operadas por la ONU proporcionan refugio a civiles que huyen de los bombardeos. En total, 220.000 personas buscan refugio de los ataques aéreos, según la organización.

UNRWA dijo este miércoles que solo tiene suficiente dinero para continuar su trabajo hasta el final del mes, y está "buscando urgentemente" US $104 millones en nuevos fondos.

Cuando se le preguntó si los gazatíes deberían utilizar un eventual corredor humanitario para abandonar el área, el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, dijo que la prioridad era proporcionar refugio seguro a los civiles dentro de Gaza.

"Es necesario proteger a los civiles. No queremos ver una masiva salida de gazatíes, y muchos de ellos ya han sido desplazados de otras partes", afirmó.

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá este viernes por la tarde para discutir la situación en Israel y Gaza.