Por Teresa Frías

El padre de Sergio Bitar Chacra, ex ministro y ex senador PPD, provenía de una zona que era provincia del antiguo Imperio Otomano. Llegó a Chile a los 17 años, hace un siglo. El político chileno es hijo de un inmigrante sirio.

Sergio Bitar, ministro de Allende, Ricardo Lagos y Michelle Bachelet defiende la causa palestina y dice: “Hay que entender ese origen para poder ver qué sale de ahí y cómo se resuelve. Hoy el problema más dramático sería que Netanyahu recurra a la venganza contra un pueblo que no es terrorista como él dice y su gente dice”.

En entrevista con Cambio21, Sergio Bitar, quién fue detenido por los militares en 1973 y enviado a la ultra inhóspita Isla Dawson agregó que “no lo veo como una discusión entre una religión y otra, o una etnia y otra, sino una discusión política y la reacción muy mayoritaria de parte de Chile es en contra de la represión de un pueblo inerme y a un pueblo débil.

El conflicto en medio oriente está en su peak ¿Cuál es su percepción?

Es el fruto de un proceso largo, que lleva desde el año 1948 con la creación del Estado de Israel que ha tenido un giro en las últimas décadas de abandono de la posibilidad de un acuerdo político, especialmente con el incremento de la extrema derecha en Israel y Netanyahu (primer ministro israelí) en particular. Eso ha generado, especialmente en la Franja de Gaza una situación de opresión, bloqueo, control total y también de desesperación.

Hay que entender ese origen para poder ver qué sale de ahí y cómo se resuelve. Hoy el problema más dramático sería que Netanyahu recurra a la venganza contra un pueblo, el palestino que no es terrorista como él dice y su gente dice.

Por lo tanto, el problema fundamental de la humanidad hoy es la máxima opresión sobre él, para lograr que no ocurra un genocidio y segundo llevar la máxima presión para una búsqueda de conversación política que haga, por lo menos con la autoridad palestina, como inicio para defender después al resto de los palestinos.

¿Cuál es su análisis sobre la reacción del gobierno chileno frente al rescate de las personas que peregrinaban, o estaban de turismo o viven en la zona en conflicto?  
Coincido con todo lo que ha hecho el gobierno. Primero, ha condenado los actos de violencia y terrorismo. Segundo, ha llamado a la contención de la réplica militar israelí. Tuvo buena intuición el Estado chileno, además de traer a los chilenos residentes en Israel.

El Partido Comunista llamó a “terminar con los dobles discursos” y recordar que “el pueblo palestino es objeto de una ocupación” ¿Cómo toma estos dichos y las críticas que ha recibido?

Depende de quien recibe o no las críticas podemos juzgarlas. Hay una pugna mundial por la incapacidad de resolver el tema político y abrir curso a una solución. No lo veo como una discusión entre una religión y otra, o una etnia y otra, sino una discusión política y la reacción muy mayoritaria de parte de Chile es en contra de la represión de un pueblo inerme y a un pueblo débil.

Esta guerra ¿Tiene un fin?

Creo que esto es un punto de infracción, tal no lo veamos porque estamos muy encima. A futuro esto es un cambio mayor y qué efectos puede tener, los que pueden ser múltiples. Es el efecto de un cambio en Israel, de política en Israel y por cierto de un cambio de Netanyahu. Una presión de grandes potencias para evitar un conflicto creciente.