Por Alfredo Peña
El doctor Juan Carlos Molina es uno de los geriatras más reconocidos del país. Ha sido Presidente de la Sociedad de Geriatría y Gerontología, ha sido profesor en la Universidad de Chile, ha escrito decenas de documentos y libros sobre su concepto favorito: “envejecimiento activo”
Entre sus logros presentó ante el tribunal constitucional elementos técnicos que significaron la abolición parcial de la ley de Isapres que discriminaba por edad para aplicar los factores de riesgo, constituyéndose en un hito de no discriminación negativa para con las personas mayores.
En entrevista con Cambio21 se explaya con pasión sobre su especialidad y sobre lo que el señala como debemos nombrar a los adultos mayores. Él les llama “personas mayores”
¿Podemos decidir cómo envejecer?
Claramente el envejecimiento tiene un componente genético que es poco modificable que tiene una carga de un 25 por ciento en relación a la genética pero el 75 por ciento restante es al ambiente. Vale decir, estilo de vida saludable, condiciones ambientales. Condiciones de educación que harán que puedan envejecer mejor. Es por esto que durante todo el ciclo de vida o curso de vida uno debe cuidarse para llegar a tener el mejor envejecimiento.
Es llegar a tener una vejez activa positiva, saludable exitosa. Esto no es producto de la casualidad. Es un continuo. Es empezar desde temprano con el cuidado relacionados al crecimiento del desarrollo. Mantener la autonomía en el mayor tiempo posible. Y cuando aparezca la discapacidad atenderla con la mayor prontitud, calidad y oportunidad para que no se instale dependencia y si esa dependencia está instalada, ésta sea con calidad de vida. Hay que dar siempre la posibilidad de la rehabilitación y este contexto no debemos ver el envejecimiento solo como un logro médico.
Es un logro socio sanitario vale decir, médico y social es por esto que las instancias necesarias de sociabilización, educación participación y consolidación de esos sueños iniciados desde pequeños son importantísimos para un buen envejecer
¿Qué significa el envejecimiento activo?
El envejecimiento activo es un movimiento que busca mantener todas las potencialidades de las personas mayores ocupando los espacios políticos, religiosos, culturales, recreativos aportativos con liderazgos. No estar sentados. El ejercicio y la actividad física es mantener o ser parte de un envejecimiento activo que prácticamente parte también en la infancia para llegar a tener una vejez activa.
El envejecimiento activo es una oportunidad que está muy de la mano de lo que es salud pero también de lo que es contacto intergeneracional de la instancia de crear modelos positivos de envejecer de superar barreras arquitectónicas, hacer ciudades para la gente y no para los autos. Recuperar espacios públicos y los aspectos sociales y económicos donde hemos centrado casi todas las respuestas desde el punto del envejecimiento como un problema y no como una oportunidad.
El problema está centrado en la salud y las pensiones y una serie de instancias más allá de la salud y las pensiones que hacen que el envejecer llegue a ser un éxito y no sea el éxito del fracaso o el fracaso del éxito.
Las condicionantes para envejecer en Chile que sea un orgullo donde se respeten valores y se les den oportunidades a las personas mayores para mantenerse activos durante todo el curso de vida.
¿Chile está preparado para tener en poco tiempo más, una mayoría de habitantes sobre los 50 años?
Debo hacer una apreciación frente a esta respuesta.
En países en vía de desarrollo a diferencia de los países desarrollados se define a persona mayor ya no tanto se ocupa la palabra adulto mayor sino la palabra persona mayor a aquella persona que ha superado los sesenta años de vida. Estos cinco años a diferencia de los países desarrollados se considera que son vitales para desarrollar estrategias preventivas especialmente en fenómenos sociales y de aparición de discapacidad.
Chile está ubicado en el país más envejecido de Latinoamérica y el segundo más envejecido de América y las proyecciones que el año 2023 las personas mayores de sesenta años van a superar a los niños menores de catorce. En Chile ocurre un envejecimiento acelerado y esto ya se logró el año 2018, vale decir lo que se pronosticaba para el año 2023 ya ocurrió el 2018 aún más en los censos del 2002 y el 2012 porcentualmente el grupo de personas que más crece en la población chilena son las personas mayores de setenta y cinco o y cercanas a los ochenta años y llegando ya a medio millón de personas y teniendo alrededor cinco mil centenarios a la fecha.
Esto nos pone en un país envejecido y claramente esto es producto de que lo hemos hecho bien en materia de salud y salubridad en condiciones ambientales pero ahora es el desafío para que Chile se ponga pantalones largos. Para que vivir en Chile sea un orgullo dado que estamos viviendo no solo el envejecimiento sino el envejecimiento ante los números de personas mayores sobre los ochenta años
Chile no está preparado. Chile aún adolece de condicionantes institucionales con narcisismo institucional gubernamental estatal y político que cada uno quiere ser el que le da la solución a las personas mayores y no hemos entendido que la era del competir está obsoleta. Debemos estar en la era del compartir y falta una instancia que agrupe de una manera intersectorial a los mejores cerebros del país para que den respuesta en políticas públicas a un estado comprometido en dar soluciones a las personas mayores.
Y eso no es nada mejor que un Instituto Nacional de Envejecimiento donde lleguen los doctorados o post doctorados de las distintas universidades y no esperar que todos los doctorados o post doctorados sean de una misma universidad.
Esto significa compartir el conocimiento en aras de un objetivo común que es dar una mejor calidad de vida y un mejor envejecimiento en el país.
¿Cómo se pueden implementar políticas que sirvan para incluir y no excluir a los adultos mayores?
Nuestro país firmó un convenio marco vinculante, uno de los mayores progresos en el último tiempo que ya fue aprobado en la Cámara de Diputados y el Senado que hace que se respetarán los derechos de las personas mayores. Eso es la convención de San José y esto probablemente incluso nos llevará a un cambio constitucional. Donde se ataca la discriminación por género, por color de piel, por orientación sexual etc. Y no se consideró por ejemplo la discriminación por edad. Esa discriminación por edad tiene un término de edadismo o viejísmo, vale decir una discriminación tan nefasta como el racismo. Desde ya debemos erradicarla actuando para futuras generaciones porque ellos ya nacieron en un país envejecido y por otro lado hay que empoderar para que los adultos mayores se visibilicen dado que el periodismo y la publicidad y las mismas leyes discriminan con las personas mayores. Nadie se reconoce como persona mayor, se hace invisible y el Estado se ha hecho muchas veces el ciego. Por lo tanto es importantísimo para no excluir que se hagan visibles, que se empoderen y que el Estado chileno legisle en propiedad para los intereses de esas personas mayores respetando su dignidad el valor y la ética que debemos tener con quienes construyeron nuestro país
Estigmatización con los viejos
¿Los adultos mayores chilenos saben ya cómo vivir su vejez?
Nuestras personas mayores aún están en un proceso de superar la estigmatización que se les ha dado por décadas en lo que significa la palabra viejo y en lo que significa la discriminación con los viejos en nuestro país. Es por esto que nunca pensaron envejecer como ahora se envejece en Chile. Llegaron a los sesenta años y pensaron que al poco andar iban a fallecer y resulta que a los sesenta años la probabilidad de llegar a los ochenta años en por sobre el 95 por ciento. Por lo tanto en vez de sobrevivir deben vivir y en este contexto es muy importante entender que no se cuidaron que no supieron desarrollar estrategias.
Es por esto que ahora es crucial que este aprendizaje se haga con quienes no lo lograron pero debemos hacerlo con la población que viene en el sentido de prepararnos para una vejez que sea saludable, exitosa, activa, positiva y en este contexto debemos incorporar el conocimiento en todo el envejecimiento. Conocimiento que se llama gerontología porque sin gerontología en leyes, sin gerontología en urbanismo, sin gerontología en recreaciones, en artes en ciencias, en todas las áreas sociales no incorporaremos el tema del envejecimiento con toda la rapidez que se requiere y sin gerontología no hay geriatría. Es por esto crucial todo lo que significa la propia disposición del poder político de interpretar las necesidades de un país o ya será demasiado tarde y una de las ideas que propongo es la creación de una bancada de diputados pro envejecimiento y una bancada del Senado pro envejecimiento donde no se duerman proyectos de ley para favorecer a estas personas que no pueden esperar. Ellos necesitan una respuesta contingente y urgente a las necesidades no satisfechas del privilegio de haber envejecido en este país.
¿Y qué rol le daría al Servicio Nacional del Adulto Mayor, Senama?
Otro aspecto interesante de tener en consideración es darle poder ejecutivo de mayor cuantía al Servicio Nacional del Adulto Mayor donde más que nada son la administración de recursos para los clubes pero no tiene una política centrada en dar una respuesta global. Debería ser a lo menos una subsecretaria de la tercera edad.
¿Qué es lo vital para tener una buena vejez, fuera de la alimentación y el ejercicio?
¿Usted encuentra que el sistema de atención de las personas mayores es el adecuado el que ellos deberían recibir?