Matías Fernández puso punto final a su carrera a sus 36 años. El futbolista que deslumbró en sus inicios con Colo Colo, donde incluso llegó a ser el Mejor de América, decidió colgar los botines luego del descenso con La Serena, cerrando de esta opaca manera una carrera exitosa que lo tuvo por más de una década en el primer nivel europeo.
El Mati hizo su anuncio en redes sociales en una emotiva carta, como es habitual para los futbolistas comunicar sus decisiones. "Llegó el día de despedirme profesionalmente de mi gran pasión, el fútbol", comenzó señalando.
Luego indicó que "solo tengo palabras de agradecimiento, primero a Dios por haberme dado el don para jugar fútbol, junto a la pasión y sueños que se forjaron en las calles y la canchita de baby fútbol de La Calera".
"También le agradezco por la bendición de poder cumplir muchos de los sueños que tenía desde que comencé a jugar con cuatro años. Asimismo decir gracias a todos los que de alguna u otra manera me ayudaron a cumplir aquellos: mi padre Humberto, que está con el Señor, y mi madre Mirta. Fueron el motor que me impulsó a luchar por aquello que anhelaba cuando se me hacía difícil estar lejos de casa. Ellos me apoyaron para seguir perseverando", continuó Fernández.
Describió después a los clubes en los que jugó. "Podría escribir un libro de agradecimiento a todas las personas que estuvieron presentes y me ayudaron a crecer. Colo Colo, mi casa, mi vida. Villarreal, sueño europeo, recuerdos imborrables. Sporting, mi segunda casa, forza Sporting. Fiorentina, pasión sin límites. Milan, por lo que siempre trabajé y perseveré. Se hizo realidad. Necaxa, una familia. Junior, una ciudad que vibra por su equipo. La Serena, la ciudad que nos robó el corazón", confesó.
También tuvo palabras para la Roja. "Imposible olvidar a la selección chilena, en la cual tuve el honor de representar y que junto a mis compañeros pudimos lograr algo que nunca nadie pudo alcanzar, lo que para siempre quedará en los libros de historia y se contará".
Entre sus compañeros, eligió a dos en especial. "Son Rodrigo Meléndez y Luis Mena no precisamente porque compartimos grandes victorias, sino por todo lo contrario. Ellos tuvieron conmigo cuando sufrí grandes derrotas y me impulsaron a seguir adelante", indicó Matías.