El organismo encargado de la lucha antidopaje en el atletismo tomó nota de las sospechas de doping de atletas keniatas antes del Mundial de Doha, afirmó este lunes el presidente de la Federación Internacional de este deporte (IAAF), Sebastian Coe.
"Sé que la AIU (Unidad de Integridad del Atletismo, un organismo independiente) conoce las acusaciones aparecidas en la prensa alemana", precisó Coe. "Estoy seguro de que comunicarán a la IAAF lo ocurrido cuando lo hayan estudiado", señaló.
La cadena alemana ZDF, en primera línea habitualmente en las revelaciones sobre dopaje, afirmó que al menos dos atletas keniatas inscritos para Doha 2019 tomaron EPO antes de la competición, según se recoge en un documental publicado en su página web.
Según ZDF, que no cita nombres, se trata de un hombre y de una mujer, grabados con cámara oculta tres semanas antes de la apertura del Mundial recibiendo una inyección de EPO.
Podrían correr la misma suerte que Rusia, que ya fueron sancionados por la misma situación. Un médico, que responde protegido bajo el anonimato, da testimonio de la forma de actuar y habla de ocho atletas: "Nadie se dopa directamente antes de las competiciones, aquí usan EPO en el entrenamiento (...) Del actual equipo nacional he tratado a ocho corredores".
Preguntado por la televisión alemana, los responsables de la Federación Keniana de Atletismo (Athletics Kenya) aseguran que los atletas fueron debidamente informados de los reglamentos y avisados de que serían excluidos de por vida del equipo nacional en caso de dopaje.
Según la cadena teutona, existen casos de corrupción que implican a la Federación y a la agencia nacional antidopaje de ese país, la ADAK. "Camuflan resultados de algunos atletas, de manera que los corredores no puedan ser suspendidos", afirma un excolaborador del ADAK. "Athletics Kenya y ADAK trabajan mano a mano y ganan dinero con esto. Los deportistas o sus mánagers deben pagar", señala.
La ZDF afirma que está en posesión de documentos escritos que prueban la colaboración entre los responsables del atletismo y de la agencia antidopaje para disculpar a atletas controlados positivos.
El jefe de la AIU, Brett Clothier, preguntado por el medio germano, reaccionó por su parte: "Son acusaciones muy graves y no somos tan inocentes como para decir que no existen problemas así o de corrupción en Kenia".
Poco después, la Federación de Atletismo de Kenia (AK) reaccionó vía Twitter: "En ausencia de pruebas materiales o de informaciones adicionales, la AK no puede confirmar ni afirmar la credibilidad de estas acusaciones".
"Desde la creación de la Agencia Nacional Antidopaje, la federación no realiza ningún control antidopaje y no tiene acceso a ningún resultado de los controles. Las acusaciones que aseguran que la AK habría encubierto casos positivos son por lo tanto ridículas y parecen proceder de una persona que no conoce claramente la situación actual en Kenia", añadió.