Monarch canceló alrededor de 300.000 futuras reservas y pidió disculpas a los clientes y personal tras la declaración de bancarrota.
Aerolínea británica se declara en quiebra y deja 110.000 pasajeros sin vuelos de vuelta
Monarch Airlines se declaró en quiebra el lunes, convirtiéndose en la mayor quiebra en la historia de las aerolíneas británicas, dejando a decenas de miles de viajeros varados en el extranjero y provocando el mayor esfuerzo de repatriación de Reino Unido en tiempos de paz.
Monarch canceló alrededor de 300.000 futuras reservas y pidió disculpas a los clientes y personal tras la declaración de bancarrota.
"Lo siento mucho por los miles (de clientes) que se enfrentan a la cancelación de un viaje o unas vacaciones, por los posibles retrasos para volver a casa y por los grandes inconvenientes como resultado de nuestra quiebra", dijo en un mensaje a sus trabajadores el presidente ejecutivo de Monarch, Andrew Swaffield.
"Siento de verdad que esto haya tenido que terminar así", añadió Swaffield. El secretario de Transporte británico, Chris Grayling, dijo que la empresa fue víctima de una guerra de precios por los vuelos al Mediterráneo y pidió a los clientes que no vayan a los aeropuertos.
"Estamos haciendo lo que podemos por asegurar que esas personas que se encuentran desamparadas y no puedan regresar puedan hacerlo", dijo Grayling a la BBC, añadiendo que posiblemente buena parte de los 2.000 trabajadores de Monarch encontrará empleo en otros lugares.
El gobierno británico ha solicitado a la Autoridad Civil de Aviación alquilar más de 30 aeronaves para devolver a Reino Unido más de 110.000 clientes de Monarch que se encuentran actualmente en el extranjero.
La fuerte competencia en el sector ha presionado a las aerolíneas europeas, provocando varias fusiones. De hecho Air Berlin y Alitalia se declararon en quiebra este año y buscan nuevos inversores para parte de sus negocios.