El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, rechazó la aparición de una encuesta que lo dejó como uno de los mandatarios peores evaluados en las últimas décadas y que además lo calificó como uno de los “menos inteligentes”.
El sondeo publicado por Datafolha afirmó que el 30% de los brasileños considera muy mala o mala la gestión del gobierno del ex militar ultraderechista, mientras que el 32% la calificó como excelente o buena, 33% opinaron que era regular y un 4% no contestó.
La cifra es negativa, ya que a sus antecesores Luiz Inácio “Lula” da Silva y Dilma Rousseff marcaron un 10% y un 7% de desaprobación, respectivamente, en los tres primeros meses de administración.
Bolsonaro desestimó los números y recordó que el estudio se equivocó en los resultados de la segunda vuelta presidencial.
El jefe de Estado también ironizó con otro punto de la encuesta, que mostró que un 39% de los brasileños piensan que es poco inteligente, un 24% lo piensa de Lula y un 9% de Dilma.
En su cuenta de Twitter, Bolsonaro publicó un gráfico de Datafolha acompañado de las letras “kkkk“, una onomatopeya que significa risa en Brasil.