EL Rey Mohammed V presidió, el jueves 11 de febrero, en el Palacio Real de Fez, un Consejo de Ministros, dedicado, entre diversos puntos, a la aprobación de varios proyectos de textos jurídicos que amplían, entre otros, la representatividad de la Mujer en los procesos electorales, reafirmando así el firme compromiso del Soberano marroquí con situar a la Mujer en el centro de la escena política del país y del desarrollo tanto humano, como social y económico del Reino.
Con vistas a la preparación de las próximas elecciones generales en Marruecos, previstas en los últimos meses del año en curso, el Consejo de Ministros aprobó cuatro proyectos de leyes orgánicas que regulan estas elecciones, destinados de manera general a perfeccionar las reglas del modo electoral, reforzar las garantías electorales, definir las reglas que rigen el apoyo financiero a los partidos políticos, moralizar las operaciones electorales y reforzar la transparencia financiera de las campañas electorales de los candidatos. Uno de los objetivos principales de tales proyectos consiste en otorgar más representatividad de las mujeres en la gestión pública conforme a la Visión del Soberano marroquí de promover la igualdad de género.
Dentro de estos textos figura un importante proyecto de Ley Orgánica que modifica y complementa la Ley Orgánica relativa a la elección de los miembros de los consejos de las colectividades territoriales. Su principal objetivo es definir el procedimiento de candidatura a las elecciones de los miembros de los consejos prefectorales y provinciales, establecer un mecanismo que garantice la representatividad de las mujeres en dichos consejos concediendo el tercio de los escaños a las mujeres en cada consejo prefectoral o provincial y aumentar el número de escaños reservados a las mujeres en los consejos comunales.
De igual manera ha sido adoptado otro proyecto de Ley Orgánica que modifica y complementa la Ley Orgánica relativa a la Cámara de Representantes para desarrollar el mecanismo legislativo relativo a la representatividad de las mujeres, a través de la sustitución de la circunscripción electoral nacional por circunscripciones electorales regionales, debido al lugar constitucional de la Región en la organización territorial del Reino, así como racionalizar los mandatos electorales instituyendo la incompatibilidad entre el mandato de diputado y la función de presidente del consejo de cualquier comuna, cuya población supera los 300.000 habitantes.
Estos proyectos derivan así del firme compromiso de Marruecos de garantizar la mayor participación de las mujeres en la vida política, social y económica del país y seguir así con el constante progreso democrático emprendido desde hace décadas con múltiples reformas que han permitido mejorar la condición femenina, defender los derechos de la Mujer, así como lograr la igualdad de género y la mayor representatividad de las mujeres en los distintos procesos nacionales, en primer lugar electorales.