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Ministro brasileño afirma que hubo "preparativos" para atentar contra Lula en su investidura

El ministro brasileño de Justicia, Flávio Dino, afirmó este viernes a un periódico local que mensajes hallados por la policía sugieren que existieron "actos preparatorios" para dar un "tiro a distancia" durante la investidura del presidente Lula en Brasilia el pasado 1º de enero.

Un hombre que fue preso en diciembre tras el hallazgo de una bomba en un camión de combustible cerca del aeropuerto de Brasilia "estaba haciendo entrenamiento y obteniendo instrucciones de cómo dar un tiro de fusil desde una larga distancia", dijo Dino en una entrevista al diario Estadao, al ser consultado acerca de si el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva se encuentra "bajo una amenaza real".

En mensajes encontrados por la policía, "hay un diálogo en el que (el hombre) busca informaciones sobre cuál es el mejor fusil, cuál la mejor mira para determinados metros de distancia", prosigue el ministro en la transcripción de la entrevista hecha por el periódico.

"Había actos preparatorios para la ejecución de un tiro que iba a ser un tiro en el día de la investidura de Lula", concluye Dino.

Lula, de 77 años, ganó la elección en octubre de 2022 por un estrecho margen, de 50,9% contra 49,1%, frente al ultraderechista Jair Bolsonaro.

En vísperas de la Navidad, una semana antes de la ceremonia de asunción, un simpatizante de Bolsonaro fue detenido y acusado de terrorismo por colocar una bomba -que no llegó a explotar- en un camión de combustible cerca del aeropuerto de Brasilia.

Según dijo a los investigadores, con el atentado pretendía "iniciar el caos" e "impedir la instauración del comunismo en Brasil".

La investidura ocurrió bajo un fuerte dispositivo de seguridad, pero Lula y la primera dama Janja desfilaron ante el público en un descapotable de época, como es tradición en la ceremonia.

Una semana después, miles de bolsonaristas disconformes con su victoria vandalizaron los edificios de la Presidencia, el Congreso y la corte suprema en Brasilia, en un ataque que recordó la asonada contra el Capitolio de Estados Unidos hace dos años por parte de simpatizantes del entonces presidente Donald Trump, que se rehusaban a aceptar su derrota electoral.