El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo que la muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi en el consulado de su país en Estambul fue resultado de "un asesinato planificado".
"El asesinato pudo haber ocurrido en el consulado, oficialmente territorio saudí, pero está en nuestro país. No puede ser ocultado por la inmunidad diplomática", declaró Erdogan.
Erdogan relató en el Parlamento en Ankara numerosos detalles revelados por la investigación turca, empezando con la llegada de un equipo saudí el día anterior al crimen, que inspeccionaba diferentes localidades de la región de Estambul para preparar el asesinato.
Además, el presidente turco propuso que sean juzgados en Turquía los 18 ciudadanos detenidos en Arabia Saudí en relación con el asesinato del periodista de The Washington Post.
"Hago una llamado al rey Salmán para que estas personas sean juzgados en Estambul", dijo Erdogan.