Al menos 12 personas han muerto y 30 han resultado heridas tras un ataque a tiros efectuado por al menos dos asaltantes, uno de ellos muerto durante la respuesta policial, el otro detenido, ocurrido durante una celebración del comienzo de la festividad judía de la Janucá en el extremo norte de la playa.
Las fuerzas de seguridad han confirmado el balance inicial en una primera estimación sobre las consecuencias del tiroteo, del que informó en un primer momento la Policía del estado de Nueva Gales del Sur del comienzo del incidente.
Por otro lado declararon el incidente como “terrorista”. “Como resultado de las circunstancias del incidente de esta noche a las 21:36 de esta noche, declaré que fue un incidente terrorista”, declaró en una rueda de prensa el comisario de policía de Nueva Gales del Sur, Mal Lanyon.
“La Policía está en el lugar y se proporcionará más información a medida que esté disponible”, señalaron las autoridades.
Poco después, la Policía anunció al menos dos hombres detenidos, uno de ellos finalmente confirmado como muerto.
El primer ministro del país, Anthony Albanese, ha emitido un comunicado en el que lamenta las “escenas impactantes y angustiosas” que están llegado de Bondi y ha confirmado heridos tras el suceso.
“La Policía y los servicios de Emergencia están trabajando sobre el terreno para salvar vidas. Mis condolencias están con cada persona afectada. Estamos trabajando con la policía de Nueva Gales del Sur y brindaremos más actualizaciones a medida que se confirme más información”, ha manifestado.
“Solo podemos informarles que hemos atendido a varias personas en el lugar y, en este momento, hemos llevado a ocho personas a diferentes hospitales de Sídney”, dijo a AFP un portavoz del servicio de ambulancias de Nueva Gales del Sur.
Imágenes transmitidas en redes sociales muestran lo que parecían al menos dos tiradores vestidos de negro, así como escenas de pánico en la playa, una de las más populares y turísticas de la ciudad, con personas huyendo del sector y varias víctimas tendidas en el suelo mientras eran atendidas por paramédicos.
Testigos indicaron que algunas personas presentaban heridas visibles y manchas de sangre, algo que no ha sido confirmado por las autoridades.
“Oímos los disparos. Fue impactante, pareció que duraron 10 minutos de simplemente bang, bang, bang. Parecía un arma poderosa”, dijo Camilo Díaz, un estudiante chileno de 25 años, a AFP en el lugar.
Según el Sydney Morning Herald, uno de los presuntos tiradores fue abatido por la policía, mientras que el otro fue detenido.
Una persona anónima, calificado como un heróe por las autoridades australianas, se abalanzó sobre uno de los terroristas y lo desarmó tal como se ve en la imagen del video.
