El contralor general, Jorge Bermúdez, admitió a la presidenta de la Cámara de Diputados, Maya Fernández, la existencia de un sumario extraviado que data del año 2010 y que constataba en esa época irregularidades en la gestión financiera de Carabineros.
Así, según consignó El Mercurio, lo manifestó Bermúdez en un documento fechado el 30 de agosto, en respuesta a un oficio solicitado el 17 de mayo de 2017 por la comisión especial investigadora del fraude en la policía uniformada. Dicho oficio le pedía al contralor los sumarios instruidos hacia la institución policial.
Sin embargo, el 21 de junio del año pasado, el ente fiscalizador comunicó todos los sumarios, menos uno: el de la resolución exenta 1.782 de 2010. Éste fue instruido al departamento III, Tesorería y Remuneraciones de Carabineros, "por el pago indebido de remuneraciones en dicha institución, por cuando dicha situación, a esa fecha, era de 'ocurrencia reiterada', lo que hizo 'presumir la existencia de irregularidades en la materia'". Texto que no habría sido comunicado al contralor "por las unidades y jefaturas pertinentes a esta Contraloría Geneal", señaló Bermúdez a Fernández.
Producto del extravío del documento, la Contraloría envió los antecedentes al Ministerio Público, entidad que deberá tipificar el posible delito cometido. A raíz de esto, Bermúdez fue convocado a la próxima sesión de la comisión investigadora del fraude a Carabineros.