Este fin de semana se desarrollará en las calles de Santiago una nueva fecha de la competencia automovilística Formula E, la que tiene como característica excluyente el que todos sus autos son eléctricos.
Puede sonar positivo, tanto para los seguidores del automovilismo como para fomentar la movilidad eléctrica en el país, pero han sido más las voces negativas que las positivas las que han hablado.
Ciudadanía insatisfecha
Muchos cortes de calles, muchos tacos, el tránsito lento, el Parque Forestal quedará hecho añicos, nadie piensa en los vecinos, todo esta desordenado, no se puede transitar por la ciudad; estos son algunos de los comentarios que miles de santiaguinos han presentado, tanto en redes sociales como en medios de comunicación tradicionales.
Son muy pocos los que encuentran positivo la actividad de este fin de semana. Y esto porque muy pocos pueden ver, a largo plazo, el enorme potencial de este tipo cd evento en particular.
La electricidad es el combustible del futuro para los automóviles. Pero muy pocos ven esto cuando estamos a días de la carrera. Un estudio del Centro de Investigaciones de la empresa Posco, Corea del Sur, señala que el año 2035 -es decir mañana- el 30% de los autos circulando en el mundo serán eléctricos. Ocupan baterías de litio, material del que Chile tiene las reservas más grandes del mundo, y utilizan cuatro veces más cobre que los vehículos convencionales. Es decir, si Chile no se "pone las pilas" pasará nuevamente por su lado una oportunidad única de desarrollo.
Chile, país de energías
Puesto como una cruzada de las autoridades, la idea es poder establecer la energía eléctrica como el principal sistema de propulsión automovilística, sabiendo que en este momento los precios siguen siendo altos, pero desde ya fomentando el cambio.
Asimismo, el mundo entero se encuentra evaluando la trascendencia de nuestro país por ser uno de los principales productores de litio, el elemento que revolucionará todo el sistema de baterías.
Tanto así, que enormes entidades del mundo empresarial, como la multinacional Tesla y algunas empresas chinas, ya evalúan la instalación de plantas de producción en nuestro país, para aprovechar el potencial del litio.
Algo semejante se quiere implementar con la electricidad, siendo esta la finalidad última de la carrera de este fin de semana: concientizar, poner el tema en la agenda ciudadana y despertar en Chile el espíritu por el cuidado del mediambiente.
Mirada a largo plazo
Flavio Salazar, vicerrector de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile, describe el potencial del litio y de nuestro país como productor.
“Nuestro país posee una de las mayores reservas de este mineral en el mundo, pero lo está exportando sin visión estratégica y con mínimo valor agregado. Esto provoca que se pierdan posibilidades de desarrollo tecnológico de base científica, generación de empleos y mayores ingresos económicos, además de descuidar los potenciales impactos sociales y ecológicos”, asegura en investigador.
“Estamos hablando de un recurso fundamental para el presente y futuro del mundo, gracias a sus singulares propiedades físico-químicas. Hay tres aplicaciones destacadas del litio que abren un sinnúmero de posibilidades en investigación y desarrollo: su capacidad para almacenar energía en baterías eléctricas y acumuladores termosolares; su eficiencia energética, con el uso de aleaciones livianas y resistentes en aviones, barcos y rodados, como son las de aluminio-litio; y además constituye el elemento clave en la producción del tritio, que es el combustible de la fusión nuclear”, indica Salazar.
“A pesar de estas aplicaciones y muchos otros usos por investigar, Chile hoy solo está en condiciones de exportar la materia prima sin procesar, al igual que lo hizo con el salitre y lo hace actualmente con el cobre. No podemos dejar una vez más que las principales riquezas nacionales sean capitalizadas exclusivamente por entes privados, cuando es el Estado quien debe jugar un rol activo, incorporando la ciencia y tecnología de forma estratégica con mirada de futuro. Agregar valor a nuestros recursos, no solo al litio, contribuirá a generar más riqueza para el país, mayor sustentabilidad, bienestar y desarrollo. Esto es urgente para construir un país más justo, con una mejor educación, mejor salud y mejor previsión, ámbitos que se beneficiarían de una economía basada en el conocimiento”, señala.
Cambio21 conversó con Jaime Arriagada, académico de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Central, quien comentó algunos aspectos positivos de la que este fin de semana se desarrolle la competencia de Formula E en nuestro país.
“Lamentablemente la carrera se ha enfocado en el impacto urbano antes que en la tecnología presente. Hay un tema clave, que tiene que ver con la tecnología de los vehículos: alta potencia con una base en motor eléctrico. Algo que no se había visto en el último tiempo, hasta la aparición de un importante agente: Tesla. Esta empresa rompe con este paradigma”, apunta el académico.
"Nuestro país puede relacionarse con esta tecnología por tener grandes reservas de litio, por ser uno de los componentes primarios de las baterías, lo que es el componente de mayor costo en este tipo de motores. Esta carrera tendría que posicionar el nombre de Chile en este tipo de materias. Lo que debería suceder es que la ciudadanía se empodere y comience a considerar que esta tecnología es la que mejor le hace al planeta”, resume Arriagada.
Sobre la necesidad del país en implementar este tipo de tecnologías, para el académico de la Universidad Central la responsabilidad es de todos y “esta carrera permite poner el tema sobre la mesa. A la población le queda la responsabilidad de exigir las políticas de los distintos gobiernos en materia del incentivo del uso de productos renovables. Esto es, fomentar y potenciar la implementación y la utilización de los automóviles eléctricos”, concluye.