El sargento segundo de Carabineros que disparó contra Brandon Hernández Huentecol fue condenado este viernes por el delito de lesiones graves.
Sin embargo, fue absuelto por el delito de apremios ilegítimos, en vez de eso, lo declararon culpable de vejámenes injustos.
El hecho se registró el 18 de diciembre de 2016, en medio de un operativo policial en Collipulli.
En ese momento, el joven que tenía entonces 17 años, recibió un disparo por la espalda, quedando con secuelas físicas que le afectan hasta el día de hoy.
El sargento fue acusado de ser quien disparó el arma antimotines que dejó a Brandon con cerca de 100 perdigones en su espalda y una fractura de pelvis.
Mientras los abogados querellantes señalaron que el efectivo policial tenía intención de matar, desde la Policía de Investigaciones declararon que sólo fue un acto negligente.