Oh I'm just counting

Evangélicos: Piñera calificó esta nueva edición como "un gran Tedeum”

Unos 20 minutos más de lo presupuestado, finalizó el Tedeum Evangélico 2019. La ceremonia, en la que estuvo presente Sebastián Piñera junto a la Primera Dama, Cecilia Morel, y gran parte del gabinete, fue calificada por el Mandatario como "un gran Tedeum" y en ella se habló desde el proyecto de las 40 horas hasta los escándanlos vividos dentro de la Iglesia.

"Fue un gran Tedeum, una ceremonia para agradecer a Dios (...) en el maravilloso país en el que nos ha permitido vivir. Quiero también expresar mi profundo reconocimiento y gratitud al mundo evangélico, por la defensa de valores tan importantes como la vida, la familia, la solidaridad y, también, por el espíritu de entrega y de amor al prójimo", sostuvo el mandatario a las puertas del Centro Cristiano Internacional de San Joaquín, lugar donde por primera vez se realizó el Tedeum.

"Yo recorro Chile permanentemente y siempre en las cárceles (...) está la palabra evangélica, los hospitales donde están los enfermos está la palabra evangélica, en los lugares donde intentan rehabilitarse jóvenes de las drogas, está la palabra evangélica, por eso agradezco. Porque la entrega, el amor y el compromiso del mundo evangélico ayuda a tener más esperanza y más luz a los chilenos y chilenas menos favorecidos", sentenció Piñera sobre el mundo evangélico.

Uno de los temas que se trató en el Tedeum y que terminó con un aplauso generalizado de parte de los asistentes fue el proyecto de ley de las 40 horas laborales. "Hoy se discute rebajar la jornada a 40 horas, sin duda no negamos que la iniciativa es movida por buenos sentimientos, pero en realidad pienso -sin ser majadero- pasa más por un tema valórico y de principios, donde los trabajadores se comprometan a tener una actitud honesta, un compromiso con su esencia", dijo el obispo Jorge Méndez en medio del sermón.

"Sembrando acciones cosechamos hábitos, sembrando el hábito cosechamos el carácter y el que siembra un carácter lo acoge un destino, por lo tanto, lo desarrollamos. Un carácter noble y capaz no se hereda, no lo recibimos accidentalmente, lo obtenemos mediante esfuerzo individuales realizados por los méritos y la gracia de Cristo. Dios da los talentos, los dones, nosotros formamos el carácter, lo desarrollamos sosteniendo rudas y severas batallas contra el yo. La realidad actual es realizar el trabajo donde un capataz o un supervisor debe fiscalizar el trabajo para que pueda ser bien hecho, en cambio, en una sociedad con principios y verdaderos valores cristianos, trabajará, producirá más, porque sabe que no sirve al gerente o al jefe de una empresa, sino que sirve al rey de reyes y Señor de señores , Jesucristo", sentenció en medio de aplausos.


También huo referencias a la sequía y escándalo en las iglesias cristianas.