En las últimas horas se difundió que el Poder Judicial aprobó la compra de 22 vehículos de alta gama, marca Lexus, para renovar la flota de automóviles en los que se movilizan los ministros de la Corte Suprema y el fiscal judicial.
Actualmente utilizan vehículos Toyota Camry, los cuales serán reemplazados por el modelo ES300h de Lexus, cuyo precio supera los $57 millones, del tal modo que la entidad desembolsaría más de $1.250 millones.
Sobre lo anterior se le consultó la opinión al ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien aclaró que el Ejecutivo no puede ni debe interferir en esas decisiones, ya que el Poder Judicial es autónomo y maneja su propio presupuesto.
“No tengo mucho más que decir (…) El Poder Judicial es autónomo. El Gobierno no resuelve qué autos se compran”, subrayó.
Pero luego, lanzó un dardo de manera muy sutil: “Yo tengo un vehículo año 2015 con 260 mil kilómetros y todavía funciona bien”, dijo, citado por Agencia UNO.
Conforme a lo que constató La Radio, del total de 13 jueces que participaron en la votación para la compra de los mencionados vehículos, once aprobaron y solo dos dijeron que no.