A pesar de las versiones contrapuestas que existen en torno al hecho, lo que se sabe es que ocurrió a las 6 de la mañana del pasado domingo, cuando comenzaba la última jornada de un "paseo del ombligo" en el que participaban alumnos de la Universidad del Desarrollo en El Tabo.
Según una de las involucradas, despertó en ese minuto para darse cuenta de que estaba siendo abusada sexualmente por un compañero. De acuerdo al relato del denunciado, se trató de una relación sexual consentida. Ambos habían ingerido grandes cantidades de alcohol, según publica Emol.cl.
El hecho, que fue denunciado por la estudiante en Carabineros y terminó con el alumno con arresto domiciliario durante el plazo que dure la investigación, es el más reciente de los que afectan al plantel universitario, pero no es el único.
El pasado 30 de septiembre, un académico quedó en prisión preventiva, luego de ser denunciado también por violación por una alumna en un contexto extracurricular.
Además, una estudiante de Ingeniería Comercial presentó una querella en contra de un compañero que también habría abusado sexualmente de ella. Si bien aún se investiga, terminó con la decisión de la joven de renunciar a la universidad.
En agosto pasado, la casa de estudios promulgó un reglamento de procedimiento frente a denuncias de acoso sexual, violencia de género y discriminación arbitraria, pero el área de acción se restringe a los hechos acontecidos "en las instalaciones de la universidad" o "fuera de ella en el contexto de actividades organizadas por esta institución".
Los tres casos que llegaron a la justicia, por tanto, están excluidos. Pero las autoridades académicas admiten que el tema del abuso sexual y el acoso se ha vuelto relevante, sobre todo después de un año marcado por movilizaciones feministas.
"Para las universidades hoy día esto es un tema de preocupación que no existía diez años atrás", dice a Emol el secretario general de la UDD, Gonzalo Rioseco. "La universidad está preocupada, tiene los protocolos y los pone en ejercicio. Hoy en día, las instituciones lo han tomado como una tarea adicional de la que deben preocuparse”, añade. Eso es lo que, asegura, está haciendo la casa de estudios, aunque algunas de las afectadas disienten.