La madrugada de este lunes, desde el Vaticano confirmaron que el Papa Franciso aceptó la renuncia de Juan Barros de la diócesis de Osorno a raíz de los casos de abuso sexual que remecieron a la Iglesia chilena. A él también se sumó el obispo de Puerto Montt, Cristián Caro, y el obispo de Valparaíso, Gonzalo Duarte.
De esta manera, sus puestos quedarán vacantes de momento, quedando a cargo tres administradores apostólicos: Ricardo Morales en Puerto Montt, Pedro Ossandón en Valparaíso y Jorge Concha en Osorno.
Tras conocerse la noticia, Juan Carlos Cruz, víctima de los abusos de Fernando Karadima, reaccionó a través de su cuenta de Twitter, quien no pudo ocultar su alegría.
“Empieza un nuevo día en la iglesia Católica de Chile! Se van tres obispos corruptos y seguirán más. Emocionante por tantos q han luchado para ver este día. La banda de obispos delincuentes @episcopado_cl se empieza a desintegrar hoy! (sic)”, consignó.