A los 100 años murió Beltrán Villegas. Su misa de despedida se celebrará este jueves 10 de octubre a las 14:30 horas en la parroquia La Anunciación ubicada en Pedro de Valdivia con Bilbao, en la comuna de Providencia, en Santiago.
El obispo Ignacio Ducasse, valoró su labor señalando que "La Iglesia de Chile y especialmente la Congregación de los Sagrados Corazones pierden a un gran religioso y gran sacerdote. El padre Beltrán Villegas se destacó fundamentalmente a partir del Concilio Vaticano II hasta hace algunos unos años, mientras se lo permitió su salud, en la formación bíblica y también con muchas cooperaciones a la Conferencia Episcopal, especialmente en el Área Eclesial. Allí prestó sus servicios, ayudó especialmente en la redacción de algunos documentos en la temática bíblica y en la formación de muchos agentes pastorales de nuestra Iglesia en Chile. Sentimos mucho su fallecimiento, pero también creemos que ya está participando de aquello que celebró en el sacramento de la Eucaristía y enseñó a través de la escritura, lo que es el encuentro con el Verbo, con Jesucristo el Señor".
Beltrán Villegas Mathieu nació el 20 de mayo de 1919. Una prolífica vida entregada al servicio de la enseñanza de la sagrada escritura. Alberto fue llamado al nacer, como hermano menor de 4 hijos de Alberto y Amelia.
Durante largos años, y algunas excepciones en que se ausentó para seguir estudiando, fue profesor y director del esca.olasticado de la congregación, enseñando principalmente el dogma y la Sagrada Escritura.
Desde 1968 comenzó a enseñar de modo habitual en la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Chile. En agosto-septiembre de 1968 participó en la Segunda Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Medellín, como teólogo oficialmente invitado a formar parte de ella.
Fue vicedecano de la facultad de Teología UC, los años 1969-1971. El segundo semestre de 1972 viajó a Jerusalén para un año sabático para el estudio de la Sagrada Escritura. En diciembre de 1973 fue elegido como Decano de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Chile, para el período 1974-1976.
Durante estos años actuó permanentemente como asesor teológico de la Conferencia Episcopal de Chile. Los años 1974-1982 fue nombrado Consultor Teológico del Celam. En 1979 fue invitado a participar como asesor de los obispos chilenos en la Tercera Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, en Puebla. En octubre de 1980 fue elegido como miembro de la Studiorum Novi Testamenti Societas, de Cambridge.
En septiembre de 1982 fue elegido Consejero General de la Congregación, con residencia en Roma los años 1983-1989. Antes de partir, el 26 de noviembre de 1982 fue distinguido como Doctor Honoris Causa por la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Retornado a Chile a fines de 1989 fue a vivir a la comunidad adjunta al Colegio de Manquehue y continuó enseñando en la Facultad de Teología hasta el año 1999.
Beltrán desarrolló un amplio trabajo intelectual que se expresó en innumerables conferencias, en una predicación cuidada y de calidad, y en la publicación de más de 150 trabajos de calidad científica publicados desde mediados de la década de 1950 hasta 2002. Sus grandes campos de estudio fueron la teología de San Pablo, los evangelios sinópticos, los Salmos y más ampliamente la literatura sapiencial.