Parlamentarios oficialistas no descartan la posibilidad de recurrir en contra de su propio gobierno con el fin de modificar el protocolo de objeción de conciencia de la ley que despenaliza el aborto en tres causales.

Los diputados de Chile Vamos aseguran que la Contraloría se excedió en sus facultades al resolver que las instituciones de salud con convenio con el Estado no pueden ser objetoras de conciencia, razón por la que analizan llevar nuevamente el proyecto al Tribunal Constitucional.

Entre las alternativas que analizan se encuentra impugnar la resolución o recurrir en contra del proximo decreto del gobierno, cuando se dicte el nuevo reglamento.

El presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, aseveró que "estamos evaluando. La mayoría de los abogados coinciden que no procede recurrir contra el dictamen del contralor; hay otros que dicen que sí y vamos a pedir una tercera o cuarta opinión".

"De no hacerlo así está la posibilidad de recurrir respecto del decreto que dicta el reglamento que ordenó la Contraloría, o sea, el decreto de nuestro gobierno", precisó.

Al conocer esta posibilidad, la diputada comunista Camila Vallejo indicó que "me parece ridículo, me parece que es irresponsable y demuestra una vez más que a la derecha le interesa más bien proteger la objeción de conciencia de las instituciones privadas en materia de salud antes que los derechos de las mujeres que están esperando".

Desde Contraloría, Jorge Bermúdez manifestó que "si son partidos políticos los que cuestionan las decisiones de la Contraloría, yo lo único que puedo decir es que lo que hace la Contraloría es un trabajo técnico, no es un trabajo político".