Los 13 indultos entregados por el Presidente Gabriel Boric siguen dando que hablar: la presidenta del Partido por la Democracia (PPD), Natalia Piergentili, en la foto, contó la última crisis de Gobierno, que terminó con el congelamiento de las negociaciones por la mesa de seguridad con la oposición.
La timonel abordó el actual estado del Gobierno, luego de la renuncia de la ministra Marcela Ríos y del jefe de gabinete de Presidencia, Matías Meza-Lopehandia, ocurrida el sábado.
“Hay que tener una coherencia entre los planteamientos y los proyectos de ley. Además, se están jugando responder a un problema y un dilema público que existe hoy, que rebasó la capacidad del Estado”, comenzó diagnosticando la presidenta del PPD, antes de invitar a “volver” a la mesa de seguridad.
Luego detalló: “Se hace una falsa dicotomía respecto de que los indultos son haber indultado casi delincuentes comunes entonces es un contrasentido de la mesa de seguridad. Una de las cosas por las cuales tenemos una ministra y un jefe de gabinete menos, es porque el Presidente pidió que las personas que se indultaran tuvieran solo prontuario a propósito del estallido, que es una anomalía social, no que tuvieran prontuario delictual anterior. Eso es lo que no se cumple, de los enredos que hay, de la falta de prolijidad”.
“Hay una voluntad presidencial de reparar un momento anómalo de violencia, de barbarie social, por decirlo de alguna manera, y no dar una señal de que aquí va a haber mano blanda con la delincuencia”, añadió en canal 13.
Pasado el mediodía, el diputado de Convergencia Social, Gonzalo Winter, quien también participada del panel, planteó una teoría de lo que podría haber ocurrido: el Presidente Boric habría pedido “que los antecedentes fueran filtrados y que no llegaran a su escritorio quienes tengan un prontuario de delitos anterior al del estallido. Es lo que interpreto”.