La posibilidad se ha conversado en reuniones de distintos grupos del partido y genera reacciones opuestas: mientras Progresismo con Progreso se siente distante a Guillier, hay quienes consideran que la decisión podría significar el fin de la Nueva Mayoría
Tensión dentro de la DC por eventual escenario de segunda vuelta: Surge opción de "libertad de acción"
Gutenberg Martínez, a comienzos de octubre, citó a una cena en un restaurant de la zona oriente de Santiago a varios de los sectores que integran la DC. El motivo de la reunión, de acuerdo a quienes asistieron, fue abordar lo que pasará después del 19 de noviembre, cuando se defina qué candidatos pasarán a segunda vuelta, según consigna La Tercera.
El tópico ha concitado atención desde que la falange anunciara, en abril, que llevaría a su propia candidata a primera vuelta, y sobre todo tras la carta firmada por al menos diez diputados y algunos consejeros del partido, que buscaba concretar un acuerdo con los partidos que respaldan a Alejandro Guillier y enfrentar la segunda vuelta de manera unida.
Dentro de la colectividad, ése es el debate que estpá ocurriendo: si llegar a un entendimiento pronto con el "guillierismo" o impulsar la alternativa de que se dé "libertad de acción" a los militantes, en vez de dar un apoyo constitucional a Guillier, en el caso de que sea quien se enfrente a Sebastián Piñera, como sugieren las encuestas preliminares.
Fue también el tema que se trató en la cena que encabezó Martínez y se ha explorado abiertamente en el sector Progresismo con Progreso, que integran figuras como la ex ministra de Educación Mariana Aylwin, los economistas Álvaro Clarke, Eduardo Aninat, y el ex ministro de Salud, Pedro García, entre otros.
No fue la primera reunión que sostuvo el grupo con ese fin. En las últimas semanas han sostenido una serie de encuentros donde se ha abordado el escenario. Se trataría de una "etapa de discusión" para resolver las definiciones públicas que tomarán y que culminarían en la redacción de un texto para fijar su posición.
El grupo, que critica también la cercanía de Guillier con el Partido Comunista, espera reunirse de nuevo la próxima semana, mientras han reforzado las conversaciones con otros sectores del partido, principalmente los de ADN concertacionista, que defienden que en segunda vuelta hay que votar por “convicción” y no por orden de partido.
"Va a depender mucho de qué pase con el resultado de las elecciones y no me atrevo a pronosticar qué es lo que va a pasar”, afirmó al periódico Mariana Aylwin. “Voy a resolver en mi absoluta convicción y no voy a pedir permiso”, seguró por su parte el ex ministro Genaro Arrigada.
“(La diputada Yasna) Provoste (…) lo ha enunciado y la cito textualmente: ‘en política uno actúa en virtud de sus convicciones y no de los permisos que uno pueda solicitar’. Si Yasna y diez candidatos a diputados han tomado esa bandera, que no vengan a pedir órdenes de partido para la segunda vuelta”, agregó el ex secretario de Estado.
"La DC cometería un error histórico si es que da libertad de acción. Es como renunciar a la política que un partido dé libertad de acción en una elección presidencial. La DC está llamada a conducir, no a ser un mero observador. Eso podría terminar generando un cisma dentro del partido", consideró el diputado Fuad Chahín.
Conscientes de la posibilidad de ese quiebre, algunos personeros de la colectividad que defienden esa tesis han planteado en diálogos privados fórmulas para concretar la mencionada libertad de acción. Como opción, ha surgido la posibilidad de que se decrete un “voto voluntario” para la militancia, al margen de la decisión política que tome el partido.