A través de una carta publicada en redes sociales, Sebastián de la Rosa, nutricionista desvinculado de la Clínica Santa María tras un tuit emitido contra el diputado Gonzalo de la Carrera, se disculpó con el parlamentario, quien lo denunció de amenazarlo de muerte.
“Este personaje no puede seguir trabajando en @cl_santamaria . Al parecer trabaja en el piso 3. Es un peligro para los pacientes”, escribió el congresista en Twitter, palabras que acompañan un pantallazo de un tuit de la cuenta @sebolax en el cual se leía: “El d3 l4 c4rr3r4 está hospitalizado acá un like y me lo piteo ctm (SIC)”.
Tras esto, a través de un comunicado, la Clínica Santa María manifestó que el profesional de la salud fue desvinculado el pasado 9 de julio.
A raíz de esto, Sebastián de la Rosa publicó una carta dirigida al diputado De la Carrera, para pedir perdón por su mensaje. “Con profunda sinceridad y arrepentimiento me dirijo a usted para hacer públicas mis disculpas por la lamentable publicación que realicé a través de Twitter, que se vio vulnerada su privacidad como paciente de la Clínica”, expresó el nutricionista.
“Quiero ser enfático que bajo ninguna circunstancia busqué comprometer su estado de salud, independiente de la posición o ideología política que tenga cada persona, no corresponde realizar el tipo de declaraciones que emití, y reconozco con pesar que cometí un grave error”, agregó el joven.
En esa línea, Sebastián de la Rosa afirmó estar “profundamente arrepentido de lo sucedido, tanto por la preocupación” que pudo haber generado en el diputado De la Carrera y en su familia, “como también en otros pacientes que se atienden regularmente en dicho establecimiento de salud”.
“Considero necesario aclarar que en ningún momento su integridad física se vio en riesgo, ya que no tuve ningún tipo de contacto con (él), directa o indirectamente, durante su estancia en la clínica, como se ha mencionado en distintos medios de comunicación”, puntualizó el trabajo de la salud.
En tanto, el joven afirmó que “asumiendo mi error,” fue él quien cesó sus “funciones voluntariamente en Clínica Santa María como funcionario de la empresa externa a la que pertenezco”.