Oh I'm just counting

Editorial Cambio21: Todos los ojos sobre la Convención Constitucional

Tanto la nueva élite como la antigua élite desplazada han centrado sus análisis en lo que está ocurriendo en la Convención Constitucional, en especial porque se ha iniciado el debate de los informes en general y en particular de las comisiones de trabajo en el Pleno donde se requieren los 2/3 para que los textos sean aprobados.

En la fase previa hubo diversas señales que alertaron a parte de la opinión pública, ya que una cincuentena de convencionales proponían que los 2/3 solo operaban para la votación en particular y venían como parte de los informes al Pleno cuestiones altamente debatibles (asambleas legislativas regionales, autonomías territoriales, pluralismo jurídico por ejemplo).

La mesa de la convención impuso el criterio de que los 2/3 se requería tanto para la votación en general y en particular, también diversas materias debatibles no alcanzaron los 2/3 en particular y vuelven a una segunda redacción que afine el texto y despegue incertidumbres.

A 7 meses de instalada la Convención la opinión pública muestra inquietud sobre los resultados de ella y que tipo de texto propondrá a la ciudadanía para el plebiscito de salida.

Ciertamente la vieja élite muestra preocupación por una redacción de una norma constitucional que sea refundacional y borre los logros de las últimas décadas, para denunciar ese ánimo maximalista han constituido movimientos de opinión pública de tal manera que la deliberación constitucional no sea solo en la Convención sino también en los medios de comunicación.

Algunos estudios de opinión pública revelan una caída de la confianza ciudadana en la labor de la Convención Constitucional. En enero un 44% tiene confianza en que se redactará una nueva Constitución que sea aprobada por la mayoría y recientemente en febrero esa confianza llega al 50%, esa valoración ciudadana debiera ser considerada por los miembros de la Convención que parecieran estar actuando con un fuerte maximalismo.

La mayoría de 2/3 que se ha estructurado en la Convención -elegida en mayo 2021- muestra una fuerte representación anti élite tradicional que no se mantuvo en la elección parlamentaria de noviembre 2021, donde por ejemplo, la derecha que en la convención obtuvo 25% de los convencionales, en la elección parlamentaria obtuvo un 40% de la votación; por otro lado, la lista del Pueblo -gran sorpresa de la elección de convencionales de mayo, se diluyó y hoy es un actor con bajo apoyo ciudadano y parte de ese electorado en noviembre votó por Partido de la Gente-.

La volatilidad del electorado revela que creer que la correlación de fuerzas que eligió a la Convención se mantiene casi incólume parece ser una lectura voluntarista y errada; y surgen diversas voces llamando al realismo político y a la unidad transversal para darle estabilidad a la propuesta de la Convención.

Son múltiples las voces -no solo del mundo conservador- sino en especial de electores del Apruebo que piden prudencia y sensatez a los miembros de la Convención para que busquen acuerdos transversales basados en la historia, en la evidencia, en la experiencia comparada y no solo en los manuales teóricos que apunten a tener un macizo respaldo ciudadano en el plebiscito de salida.

Un grupo de académicos partidarios del Apruebo han realizado un llamado público a los convencionales -en esa misma línea-: “En estas horas cruciales nos dirigimos a las conciudadanas y conciudadanos a quienes elegimos para integrar la Convención a fin de implorarles que busquen sin descanso los entendimientos necesarios, para generar un todo normativo que permita procesar las diferencias y fundamentar políticas por las cuales avanzar unidos hacia el bien común y la convivencia justa”

“Les imploramos que concuerden un texto con una base de acuerdo muy amplia, como para hacer del Plebiscito de salida un momento de unidad nacional y no un momento de polarización con resultados inciertos”, advierten.
“Esto es fundamental para evitar que Chile caiga en una espiral de enfrentamientos y divisiones que impida alcanzar lo que todos queremos: una sociedad justa, solidaria, creativa, ecológica, armónica y libertaria”
Es claro que los próximos meses estarán marcados por lo que ocurra en la Convención Constitucional y la importancia de que ahí emerga un texto con una amplia base de acuerdo transversal que sea ratificado en el Plebiscito de salida como una reiteración de una voluntad ciudadana de cambios bien hechos, graduales y que nos encaminen a un mejor país.