Por Antonia Paz
La situación de distanciamiento social generada por la cuarentena puede afectar psicológicamente, por lo que es vital seguir una serie de consejos.
A pesar de que reaccionamos cada uno de modo distinto a situaciones estresantes, una epidemia infecciosa como el coronovirus puede generar rasgos comunes en lo que a salud mental se refiere. Las situaciones derivadas del estado de alarma implican así que las personas experimenten síntomas derivados del distanciamiento social, la cuarentena o el aislamiento, generando sensación de ansiedad, preocupación o miedo.
Esto viene provocado por multitud de factores, como el estado de salud propio o de otros, consecuencias laborales, incertidumbre por la situación, soledad. Para afrontar esta situación, existen una serie de consejos y recomendaciones con el objetivo de cuidar la salud mental durante la cuarentena.
En este sentido han trabajado expertos quienes han elaborado un documento sobre estas directrices. Entre ellos, la necesidad de concienciarse de la situación, poniendo el foco en el riesgo que se puede causar a uno mismo o a los demás en su entorno si no se siguiera el aislamiento indicado. Por ello, es preciso informarse acudiendo a fuentes fiables de información, así evitar también la sobreexposición a los medios de comunicación y eludiendo la ‘información’.
Perspectiva y pequeñas metas
Además, es recomendable mantener cierta perspectiva sobre la situación. Una calma que permite que evitemos pensamientos catastrofistas, evidenciando la situación pasajera y coyuntural que estamos viviendo. Por supuesto, seguir las recomendaciones sanitarias y entender que llegan por nuestro bien, es también vital.
Establecer un plan diario de actividades, fijando una rutina con metas sencillas asegura que las horas pasen también con mayor facilidad. De igual manera, es también importante no dejar de lado hábitos saludables: higiene, dieta, actividad física. Y, por supuesto, aprovechar las ventajas que ofrece la tecnología para mantener un contacto social necesario ya sea mediante vía telefónica o por videoconferencia.
Colectivos señalados
Resulta también esencial prestar atención a grupos como los niños, quienes deben ser informados de manera adaptada a su edad. Es necesario comprender que no sirve de nada mantenerles al margen u ocultarles lo que ocurre.
Los pacientes con depresión o enfermedad mental son también un colectivo sobre el que proyectar atención. Mantener el cumplimiento del tratamiento, así como el contacto y la comunicación con su entorno familiar y amigos es muy importante.
Además, ante situación de agravamiento este también este contacto ha de producirse también con los recursos sanitarios y sociales a disposición.
Por último, y no por ello menos importante, la tercera edad también debe luchar contra los efectos de la cuarentena en su salud mental. Usar la soledad en beneficio para aprovechar y realizar ejercicios de relajación o meditación es una buena pauta en este caso. Asimismo, el uso medios de comunicación para combatir el distanciamiento social y realizar actividades físicas o no son algunas recomendaciones de cara a amenizar la situación actual.