Las relaciones entre Marruecos e Israel servirán a la causa de la paz en la región, contribuirán a mejorar la seguridad regional y abrirán nuevos horizontes para toda la región.

La carta enviada por el Rey Mohammed VI al Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, fue una oportunidad para el Monarca marroquí reiterara la firme posición de Marruecos sobre la cuestión palestina y su adhesión a los principios expresados en la declaración tripartita del 22 de diciembre de 2020, en particular en lo que respecta a la
solución del conflicto palestino-israelí.

Esta declaración tripartita confirmó la posición equilibrada y firme de Marruecos sobre la cuestión palestina, así como la posición expresada sobre la importancia de preservar el carácter especial de la Ciudad Santa de Jerusalén para las tres religiones monoteístas y la posición del Rey de Marruecos como Presidente del Comité de Jerusalén.

Asimismo, Mohammed VI reafirma su compromiso firme y constructivo con el establecimiento de una paz justa y duradera en la región, refiriéndose a los lazos especiales entre Su Majestad y la comunidad judía marroquí residente en Marruecos y en todo el mundo, incluido Israel.

Marruecos considera que es necesario pasar de la lógica del conflicto a una lógica de consenso y diálogo, y salir de la situación actual dando paso a la negociación política y reforzando las medidas de confianza entre las dos partes.

Marruecos, bajo el liderazgo del Rey Mohammed VI, Presidente del Comité Al-Quds, sigue convencido de que la paz es la opción estratégica para la región de Oriente Medio, y que la vía de las negociaciones y el diálogo es la única manera de lograr un arreglo justo del conflicto palestino-israelí, basado en la solución de dos Estados, que convivan en paz y seguridad.

En este sentido, la invitación real cursada al Primer Ministro israelí para visitar Marruecos refleja el papel histórico y activo que el Reino ha desempeñado para acercar a los pueblos de la región y apoyar la paz y la estabilidad en Oriente Medio.
No cabe duda de que esta visita del Primer Ministro israelí sería una ocasión para reforzar las perspectivas de paz en beneficio de todos los pueblos de la región, y una oportunidad para dar un nuevo impulso al relanzamiento del proceso de paz, que se encuentra en un punto muerto con graves consecuencias para toda la región.

No es la primera vez que funcionarios israelíes reciben invitaciones oficiales para visitar países árabes y reunirse con sus dirigentes. En los últimos meses de este año, Benjamin Netanyahu visitó Egipto y Jordania, y el Presidente israelí y ex Primer Ministro Naftali Bennett visitó Bahréin y los Emiratos Árabes Unidos.

Estas visitas incluyeron conversaciones con los líderes de estos países árabes sobre las formas de salir del actual
estancamiento del dialogo en Oriente Medio y reforzar las medidas de fomento de la confianza para reactivar la vía de la negociación.