El conocido animador de Canal 13, Francisco Saavedra ahondó en su pasado y su vinculo con las drogas.

«Uno consume drogas porque quiere ser el chistoso», inició comentando.

El animador de «Lugares que Hablan» confesó que su primer alcance con la cocaína se debió a una compañera de curso, quien le señaló que «jalando se podía hacer todo mucho mejor». Pancho comenta que debido a este impulso mantuvo un consumo regular de estupefaciente durante seis meses de su adolescencia.

“No me siento para nada orgulloso de eso, pero sí me siento orgulloso de cómo salí, porque una prima me acusó con mis papás”, relató.

Saavedra confesó que debido a una familiar sus padres se enteraron de su problemático consumo de drogas. Por lo cual, ellos decidieron que ingresaría a un centro de rehabilitación privado.

«Ellos llegaron un domingo, revisaron mi casa y cacharon que había un lápiz con un tuvo lleno de cocaína. (Me preguntaron) que cómo llegué a eso su ellos me habían entregado buena educación, valores«, recordó el querido animador.

Pancho Saavedra comentó que en aquel momento era una persona rebelde, por lo que su respuesta fue en ese tono. «Uno súper rebelde (les respondí) pero es que ustedes me dejaron sólo en esta etapa de la vida«, confesó.

Sin embargo, en el podcast-entrevista con la periodista, Javiera Quiroga, Pancho Saavedra reflexionó sobre sus palabras comentando que «las tonteras que uno dice cuando trata de culpar al mundo por las tonteras que solamente te corresponden a ti«.

Saavedra recordó que sus padres tomaron la decisión de pagar un centro de rehabilitación privado. Sin embargo, el costo total de esta ascendía a los 11 millones de pesos. «Veo que a mi papá se le caen un par de lágrimas, y le dice a mi mamá: bueno vieja, no importa, vendemos un camión«, comentó Pancho.

Saavedra confesó que aquella escena fue el impulso que le permitió salir de las drogas, ver a sus padres sufriendo por la compleja situación que él estaba viviendo.

«Le dije a mi papá, ‘por favor, no vendas ese camión’. Y así fue, así salí”, añadió. «Aprendí a no pasarle factura a mis papás, porque hayan sido como hayan sido, mis papás son unos papás la raja, la verdad, uno no tiene por qué pasar factura, porque uno es el dueño de su vida” sentenció.

Savedra confiesa que actualmente siente asco por el consumo de cocaína. «He estado en ambientes donde de repente hay personas que sacan cocaína, y yo me voy, no puedo estar ahí, me da asco», cerró.