En mayo se anunció que Victoria's Secret ya no transmitiría su emblemático desfile anual por televisión. Esa noticia encendió las alarmas sobre lo que estaba por venir: el fin de una era.
Así lo confirmó la modelo Shanina Shayk, uno de los "ángeles" de la firma de lencería, en una reciente entrevista.
"Desafortunadamente, el desfile de Victoria's Secret no tendrá lugar este año", señaló el maniquí.
Mientras muchos fanáticos lamentan la noticia, pues se trató de un espectáculo que durante años reunió la mejor fusión de moda y música, otros opinan que es lo correcto tomando en cuenta los tiempos que corren.
Las críticas sobre el desfile se venían escuchando desde hace un tiempo y el movimiento Me Too no hizo más que realzarlas.
Un evento machista, retrógrado, que cosifica la figura de la mujer e incluso racista fueron algunos de los calificativos que destacaron en las últimas versiones del desfile anual de Victoria's Secret.
Finalmente las pérdidas económicas, la baja audiencia y la presión de los movimientos feministas lograron que este evento tal y como se celebraba desde 1995 llegue a su fin.