Existen realidades muy distantes en nuestro país, realidades que se transforman en un gran desafío para los cambios que Chile requiere. Este desafío no solo apunta a temas como la salud, la vivienda y la educación, si no también, a desigualdades más silenciosas, realidades que la sociedad pareciera no importarle. 

Una de ellas tiene que ver con lo que hacemos en nuestro tiempo libre, con nuestro ocio. En una sociedad cada vez más sumergida en el negocio (nec-otium, la negación del ocio), no se toma importancia a nuestro tiempo libre ni la calidad de este. ¿Que hacen nuestro niños, niñas y jóvenes con su tiempo libre?

Esta diferencia pasa muy desapercibida, pero en época de vacaciones millones de niños, niñas y jóvenes pasan realidades muy diferentes. Sabemos que gran parte de las familias en sectores más vulnerables no cuentan con la posibilidad de disfrutar de su tiempo libre, ni de vacaciones fuera de sus casas. La necesidad de hacer que los niños y niñas pasen su tiempo libre en actividades artísticas, culturales y deportivas es una realidad. 

Es por este motivo que la Corporación Cultural de La Granja impulsa diversas actividades gratuitas para la comunidad de La Granja y sus alrededores en este verano, ofreciendo un espacio de encuentro, aprendizaje y entretención. Una de estas actividades es la 3ra versión de la Escuela de Verano Musical que se realiza desde este lunes 17 al viernes 21 de enero, desde las 10.00hrs a las 14.00hrs en el Centro Cultural Espacio Matta. Aquí se realizan clases de diversos instrumentos que son entregados por la Corporación Cultural de La Granja, como son el violín, viola, violoncello, guitarra y piano. También se realizan actividades recreativas y deporte cada día. Las actividades son gratuitas y está dirigido a niños de 6 hasta los 16 años. La actividad concluye con un Concierto donde los alumnos muestran lo aprendido en la semana. En esta edición contamos con más de 50 inscritos, cifra que ha ido en aumento y con listas de espera. 

Tomando la practica musical como un cohesionador social, esperamos que la Escuela de Verano Musical se multiplique en cada rincón, para así aprovechar las vacaciones y el tiempo libre de los niños y niñas. Formando y transformando el entorno familiar con arte y cultura, buscando así hacer las distintas realidades menos distantes.