Oh I'm just counting

Valentín Trujillo y el fin de Pin Pon: “(Fuimos) acusados de intervenir marxistamente a los niños

El “Tío Valentín” descascarando gran parte de su vida y su carrera. Así se le vio en la noche de este domingo como invitado del espacio De tú a tú, conducido por Martín Cárcamo en Canal 13.

Ahí, el músico habló de sus inicios, de cómo empezó a trabajar a los 7 años, de su carrera como jurado de boxeo y de su mayor figuración televisiva como aliado de Pin Pon, el personaje de Jorge Guerra en el programa del mismo nombre en TVN.

“Él (Jorge Guerra) no hacía a un niño cantando o a un viejo cantando, él era un personaje”, enfatizó Trujillo con respecto a la dupla que trabajó por nueve años en conjunto.

Luego, rememoró el complejo período del golpe de estado de 1973, cuando el respacio seguía al aire. “Estábamos en Televisión Nacional, vino el golpe de estado y Pin Pon y el pianista se fueron para afuera, acusados de intervenir marxistamente a los niños de Chile… era muy grave, y convencidos de que se nos estaba acusando de algo absolutamente falso… pues era un humor transparente, limpio, hermoso, humano”.

Ese trance significó el final de la popular sociedad televisiva. “Fue terrible. Terriblemente. Porque desapareció esta pareja de Pin Pon y Valentín Trujillo”.

El “amigo Valentín” reflexionó en el programa recalcando que Pin Pon recibió el pago de Chile, porque no se le reconoció su trabajo y se le cerraron las puertas. Para el pianista fue triste -según relató- porque estuvo 17 años sin grabar y tuvo trabajo sólo en Sábados gigantes: “el único trabajo que tuve fue gracias a Don Francisco, era profesor y tuve que retirarme… por acusación ninguna, sólo pensar diferente”.

Su esposa, que era profesora del Liceo Manuel de Salas, y sus hijos, que estudiaban ahí, todos fueron expulsados. Luego comenzó a realizar unos bailes matinales donde la entrada era algún alimento, para tener para comer; “fueron 17 años que estuve vetado, injustamente”, manifestó.

Todo cambió gracias a Mario Kreutzberger, quien un día lo vio caminando por el centro de Santiago y le comentó que no existía ningún cargo contra él en Canal 13, invitándolo a trabajar al programa de los sábados en la tarde, “y ese fue el trabajo que me salvó, le debo a Mario todo”, comentó.

Antes de cerrar este tema, Valentín Trujillo entregó la siguiente reflexión: “No guardo rencor, todo lo contrario… que no suceda nunca más. Los que vivimos ese período, pedimos cuidemos la democracia, cualquier persona debe estar consciente que eso no puede volver a suceder”.