Oh I'm just counting

¡Impresionante! Directora de agencia danesa de medicamentos se desmaya violentamente en directo. Ver video

La Dirección General de Sanidad de Dinamarca suspendía ayer de forma definitiva la vacuna de AstraZeneca contra la Covid-19, paralizada desde hace un mes, al considerar que hay una conexión probable entre esta y los casos anómalos de trombosis, que hay suficientes vacunas en el mercado y la situación epidémica en este país está controlada. Durante la rueda de prensa la directora de la Agencia Danesa del Medicamento, Tanja Erichsen, sufrió un desmayo que preocupó a todos. Rápidamente fue atendida por el director de la Dirección General de Sanidad, Søren Brostrøm, que estaba a su lado y en pocos segundos recuperó la consciencia. 
 
Antes del susto, las autoridades sanitarias señalaban que están "completamente de acuerdo" con la Agencia Europea del Medicamento (EMA) en que la vacuna de AstraZeneca es "segura y efectiva", aunque recordaron que la decisión final es de cada país y aludieron a "perspectivas sociales generales", explicaba la jefa de departamento de la Agencia del Medicamento danesa. "Ahora sabemos que hay una posible explicación biológica de que la vacuna de AstraZeneca puede provocar estos casos raros de trombosis", afirmaba en rueda de prensa el director de la Dirección General de Sanidad.
 
Brostrøm habló de que había una conexión temporal entre los síntomas (baja cantidad de plaquetas, coágulos en vasos sanguíneos y hemorragias) y la vacunación y una imagen "consistente" de los casos tanto en Dinamarca como en el extranjero. En colaboración con Noruega, el otro país europeo que mantenía suspendida la vacunación con AstraZeneca, las autoridades danesas han estimado, después de estudiar sus registros sanitarios, que el riesgo de contraer esos síntomas para quienes han recibido esa vacuna es de 1 entre 40.000 y que no se puede reducir a grupos de edad o sexo determinados.



Brostrøm resaltó que hay evidencia "suficiente" para que las autoridades danesas reaccionen, si bien añadió que Dinamarca no rechaza poder recuperar la vacuna en el futuro si fuese necesario, en caso de que la situación epidemiológica empeorara de forma notable y la sanidad estuviese presionada.

Dinamarca había sido el primero en suspender el pasado 11 de marzo la vacunación con AstraZeneca, decisión que siguieron luego la mayoría de países europeos, aunque reanudaron el proceso cuando la Agencia Europea del Medicamento (EMA) aseguró que no había evidencias de relación directa con los casos de trombosis detectados. Algunos países han reservado sin embargo su uso para mayores de 60 años, como es el caso de Alemania, España y Suecia, mientras Noruega anunciará en unos días qué decisión tomará sobre la vacuna, suspendida también desde hace un mes.

Dinamarca ha registrado un muerto con ese cuadro clínico, que incluye baja cantidad de plaquetas, coágulos en vasos sanguíneos y hemorragias; y un par de casos de fallecidos con síntomas similares que aún no se habían acabado de analizar a finales de marzo. La situación epidémica se mantiene estable desde hace un mes en Dinamarca, que la semana pasada tenía la tercera incidencia de nuevos casos más baja en los últimos 14 días, con 129,15 por 100.000 habitantes, por detrás de Islandia y Portugal.