El número de muertos por inundaciones catastróficas en Alemania y Bélgica aumentó a 160 este sábado mientras los rescatistas trabajaban para despejar la devastación y buscar sobrevivientes en las partes devastadas por las inundaciones.
Al menos 133 personas han muerto en las inundaciones en el oeste de Alemania, incluidas 90 en el distrito de Arweiler, al sur de Colonia, según estimaciones de la policía el sábado.
Se confirmaron otras 43 muertes en el estado vecino de Renania del Norte-Westfalia, el estado más poblado de Alemania. Cientos de personas siguen desaparecidas.
Las autoridades dijeron que unos 700 residentes fueron evacuados el viernes por la noche después del colapso de una presa en la ciudad de Wasenberg, cerca de Colonia.
Para el sábado, las aguas habían retrocedido en la mayoría de las áreas afectadas, pero las autoridades temían que se encontraran más cuerpos en automóviles y camiones que habían sido arrastrados.
Durante los últimos días, las inundaciones han cortado la electricidad y las comunicaciones para comunidades enteras.
Las inundaciones también afectaron a partes de Bélgica y los Países Bajos. Y en Bélgica, el número de muertos aumentó a 24, según el Centro Nacional de Crisis, que coordina los esfuerzos de rescate.
“Desafortunadamente, debemos asumir que este número seguirá aumentando en las próximas horas y días”, dijo el centro en un comunicado. Siguen desaparecidas unas 20 personas.
El presidente alemán Frank-Walter Steinmeier y Armin Laschet, primer ministro de Renania del Norte-Westfalia, tienen previsto visitar Irwistadt, una de las ciudades más afectadas, el sábado.
Laschet es el candidato de la CDU en el poder en las elecciones generales de septiembre. La devastación de las inundaciones puede intensificar el debate sobre el cambio climático antes de la votación.
Los científicos han dicho durante mucho tiempo que el cambio climático provocará fuertes lluvias. Pero los científicos dijeron el viernes que tomará al menos varias semanas determinar su papel en esta fuerte lluvia.