Este miércoles, el Presidente de Argentina, Mauricio Macri, acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) adelantar los fondos que sean necesarios para garantizar el cumplimiento del programa financiero. La noticia, sin embargo, no logró calmar al mercado y el peso argentino marcó un nuevo mínimo histórico frente al dólar arrastrado por la desconfianza con el gobierno.
“Hemos acordado con el Fondo Monetario Internacional adelantar todos los fondos necesarios para garantizar el cumplimiento del programa financiero del año próximo”, dijo Macri.
La ayuda financiera se definió en junio, cuando Argentina -después de 15 años- se vio en la obligación de acudir nuevamente al organismo internacional producto de la fuerte depreciación de la moneda local. En concreto, el FMI puso a disposición una línea de crédito de US$50.000 millones, de los cuales el país trasandino ya recibió US$15.000 millones.
El respaldo logró una clama provisoria en el mercado, la cual fue interrumpida por la creciente incertidumbre respecto a la capacidad de las autoridades para cumplir los compromisos de deuda, sumado a la presión que generó la crisis turca sobre los mercados emergentes.
De hecho, pese al anuncio del adelanto de los fondos del FMI, el peso argentino alcanzó hoy un nuevo mínimo histórico, y actualmente cotiza en las 31,65 unidades por dólar.
El gerente de Finanzas de Banco CMF, Juan José Ciro, explica que la depreciación de la divisa local se originó producto de las dudas respecto a la capacidad del gobierno para cubrir el déficit fiscal, lo cual impulsó una salida de capitales. Con ello, Ciro afirma que pese al apoyo financiero del FMI, es probable que el peso argentino continúe devaluándose.
“A priori (el anuncio) generó soporte para los bonos cortos, pero los largos todavía no recuperan, me parece que el mercado quiere ver los números concretos para volver a apostar. (…) se restó incertidumbre para la deuda de corto plazo”, dice Ciro.
En la misma línea, un operador del mercado trasandino concuerda con que la principal presión para el peso trasandino radica en las dudas de que el gobierno logre saldar la deuda el año que viene, pero además agrega que el acuerdo con el FMI contiene cláusulas contradictorias para Argentina.
“La desconfianza es muy alta. El acuerdo con el fondo tiene metas de inflación y de déficit fiscal que son contradictorias. No se puede bajar la inflación y el déficit y pretender crecer todo al mismo tiempo”, dice el analista.