16 muertos, calles anegadas y cientos de miles de clientes sin energía eléctrica, son las consecuencias del fuerte temporal que afectó a Argentina durante el fin de semana.
A raíz de la emergencia, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires decretó «Estado de Emergencia» en todo el territorio, sumado a tres días de duelo provincial.
El gobierno de Axel Kicillof también dispuso asueto administrativo y escolar para algunas ciudades, como Bahía Blanca, Coronel Rosales, Tres Arroyos y Monte Hermoso. También en las localidades de Médanos, Chapelco, Teniente Origone y Juan Couste.
"Fue una verdadera catástrofe climática. Venimos de un tiempo de mucha sequía y ahora esta tormenta. Es imposible negar el cambio climático. Por suerte, estos cuatro año hicimos muchas inversiones vinculadas a defensa civil, a helicópteros para atender catástrofes y estamos muy equipados", señaló el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, en declaraciones entregadas a medios del país trasandino.
La tormenta comenzó a las 19:00 horas del sábado en la ciudad de Bahía Blanca, donde fallecieron 13 personas a raíz de las ráfagas de viento de 150 kilómetros por hora, los que provocaron la caída de más de 5 mil árboles.
Luego, el fenómeno se extendió a la ciudad de La Plata, para continuar al centro y al norte de Buenos Aires, dejando voladura de techos, caída de árboles y cortes de luz.
En ese sentido, se informó que unos 150 mil clientes de la energía eléctrica se encuentran sin luz en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), de los cuales 77 mil corresponden a la empresa Edesur y 70 mil a Edenor.
Las zonas más afectadas son San Vicente, Almirante Brown, Avellaneda, Cañuelas, Esteban Echeverría, Florencio Varela, Lanús y Presidente Perón, lugares donde –hasta el momento– se desconoce una fecha exacta de reposición.