Es Highponint Church, Memphis, Texas. Domingo 7 de enero de 2018. La iglesia está repleta y los feligreses escuchan atentamente el discurso del pastor Andy Savage.
“Como estudiante universitario en el personal de una iglesia en Texas hace 20 años, lamentablemente tuve un incidente sexual con una estudiante de último año de secundaria”, dijo mientras leía a los asistentes un mensaje en su celular.
El caso al que se refiere fue el que denunció Jules Woodson, quien denunció en un blog el abuso sexual del que fue víctima, aleonada por la ola de denuncias del movimiento #MeToo. El abuso ocurrió en 1998, cuando Woodson tenía 17 años.
“Este incidente fue resuelto hace 20 años en Texas, pero en los últimos días se ha presentado a un público más amplio. Me equivoqué y acepté la responsabilidad de mis acciones. Lo sentí entonces y lo sigo siendo hoy. De nuevo, sinceramente le pido perdón y oro por la sanación continua de Dios para todos los involucrados”, dijo Savage, recibiendo la ovación del público presente.
“Es repugnante”, afirmó Jules en una entrevista a The New York Times. “No importa si fui su única víctima. Lo que importa es que este fue un problema grande y lo sigue siendo”.
“Es un acto totalmente abominable”, dijo.