Los líderes del G7 se pusieron de acuerdo para ayudar a los países afectados por los incendios en la Amazonía "lo más rápido posible", en una cumbre en Francia marcada por fracturas internas sobre la crisis nuclear iraní y la llegada sorpresiva del jefe de la diplomacia de Teherán.
A las 14:13 locales (08:13 de Chile) aterrizó en el aeropuerto de Biarritz un avión oficial iraní, en el que viajaba el ministro de RR.EE. Mohammad Javad Zarif.
"Estamos todos de acuerdo para ayudar lo más rápido posible a los países afectados por estos incendios", dijo el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, anfitrión de este foro de los países más industrializados occidentales más Japón, que se reúne del 24 al 26 de agosto en la localidad francesa de Biarritz.
Las imágenes del pulmón del planeta en llamas han levantado una ola de indignación mundial y llevaron este asunto al centro de las discusiones del G7, pese a las críticas de Brasil, que no forma parte de este grupo.
"Nuestros equipos están tomando contacto con todos los países de la Amazonía para que podamos concretar nuestros compromisos con medios técnicos y financieros", detalló el Mandatario francés.
Macron rechazó además las críticas sobre una eventual intromisión en asuntos soberanos de otros países, y recordó que Francia es "uno de los nueve países amazónicos" a causa de la Guayana, territorio francés localizado en el noreste de Sudamérica.
"La importancia de la Amazonía para estos países como para la comunidad internacional es tal -en términos de biodiversidad, oxígeno y lucha contra el calentamiento climático- que debemos proceder a una reforestación", abogó el francés.