El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, exhortó a los argentinos a ofrecer una resistencia civil pacífica frente al nuevo gobierno de Javier Milei, al que comparó con el exmandatario del país sudamericano Carlos Menem.
López Obrador, un nacionalista de izquierda, había calificado anteriormente de "autogol" la elección del libertario Milei en los comicios de noviembre, aunque dijo que respetaba la decisión de los electores.
"Lo que sí le digo al pueblo argentino (...) es que no caigan en ninguna provocación, que es eficaz políticamente la no violencia, la resistencia civil pacífica. No hay que exponerse, hay que evadir el acoso, pero eso no significa no protestar", dijo el mandatario mexicano en su rueda de prensa diaria.
Aún con Milei como presidente electo, organizaciones civiles y sindicatos de Argentina desarrollaron a fines de noviembre una primera protesta antes de su asunción contra el político ultraliberal -que ha prometido recortar gastos, privatizar firmas estatales y dolarizar la economía- y han amenazado con realizar más.
López Obrador, conocido por el acrónimo AMLO, reiteró que no está conforme con las políticas del flamante presidente argentino y las comparó con experiencias pasadas.
"Eso ya lo aplicó el finado expresidente Menem. Es como si quisiéramos regresar a lo que llevó a cabo (Carlos) Salinas (1988-1994) en México. Es lo mismo, nada más que ahora con más actuación, con más circo y teatro", agregó.
Menem gobernó en Argentina entre 1989 y 1999, una década signada por logros como la estabilización cambiaria con la convertibilidad que igualaba la paridad del peso al dólar, aunque luego una profunda recesión llevó a un descalabro económico, con pobreza y desempleo.
Tras la elección de Milei, AMLO había señalado también que no está de acuerdo "con los gobiernos racistas, clasistas", aunque la Cancillería mexicana había felicitado previamente al nuevo mandatario por su triunfo y anunciado que buscará mantener una relación "constructiva" con su administración.