Este jueves fueron los funerales de la pequeña Ámbar, la menor que este fin de semana fue violada y asesinada por su guardador, en la comuna de Los Andes.
El velorio comenzó después de las 9:00 horas, en la iglesia La Asunción de Los Andes, con la presencia de unas 1.000 personas que llegaron al lugar, la mayoría de las cuales no conocían a la menor, pero quisieron solidarizar con la familia. Muchos de ellos portaban globos rosados y blancos para recordar a la menor.
"Yo no la conocía, pero el dolor... tengo niños chicos, estamos todos muy tristes en la casa, entonces yo vine ahora a despeirla, sin que la haya conocido, porque es nuestra. Y creo que la justicia chilena le falló a Ambar. No es posible que a los niños los lastimen", afirmó una de las asistentes a los micrófonos de Cooperativa.
La presencia masiva obligó a Carabineros a cortar el tránsito en las calles aledañas y una de las funcionarias, que no quiso identificarse, reconoció que cumplir su función en esta situación "es difícil, porque uno lo ve del lado de mamá. Es complicado pero uno igual tiene que cumplir los dos roles (mamá y carabinera)".
La sepultura se realizó en el Cementerio Municipal de Los Andes, donde tras la ceremonia hubo algunos incidentes, ya que asistentes increparon a la madre de Ámbar con gritos e insultos, y la echaron del lugar. La mujer tuvo que salir del cementerio resguardada por Carabineros para evitar ser agredida.