La tercera sala de la Corte de Apelaciones revocó la decisión del 8º Juzgado de Garantía, que había decretado el sobreseimiento definitivo de siete carabineros formalizados por torturas y violencia innecesaria contra Moisés Órdenes (55).

El hecho ocurrió la noche del pasado 21 de octubre, en el contexto del estallido social, cuando Órdenes llegó a manifestarse a un cacerolazo en la Plaza de Ñuñoa. Según los antecedentes, el hombre recibió una golpiza por parte de funcionarios de Carabineros, lo que quedó registrado en un despacho televisivo en directo.

Además, Órdenes sufrió politraumatismos y la pérdida total de la visión de su ojo izquierdo.

Los siete funcionarios acusados de torturas y violencia innecesaria en la comuna del sector oriente de Santiago que incluso cumplieron prisión preventiva en un momento no serán sobreseídos como había determinado el juzgado.

La acción se produjo minutos antes del toque de queda que regía en todo el país y fue captada por un canal de televisión, que mostró en vivo como uno de los acusados golpea con una patada por la espalda a Moisés Órdenes y otros seis lo golpearon con sus bastones en el piso.

El fiscal a cargo del caso Álvaro Pérez denunció durante la formalización a los uniformados que la víctima tuvo lesiones graves producto del hecho, entre ellos la pérdida de la visión de uno de sus ojos.

En primera instancia eran doce los funcionarios que habían sido acusados, sin embargo, cinco de ellos fueron sobreseídos y los otros siete habían quedado en prisión preventiva en un primer momento, la que luego también fue revocada.

El Octavo Juzgado de Garantía había determinado que no había existido tortura ni violencia innecesaria en los hechos, denunciados, sin embargo, la Tercera Sala de la Corte de Apelaciones revocó este fallo.



Desde el Instituto Nacional de los Derechos Humanos (INDH) valoraron la decisión del tribunal de segunda instancia.