Marcela Aranda, la mujer que denunció al fallecido sacerdote Renato Poblete, ahondó en los abusos que sufrió contando incluso que el otrora líder jesuita la obligó a abortar en tres oportunidades.
La teóloga contó a Ahora Noticias que el sacerdote jesuita "comenzó a abusarme sexualmente con mucha violencia. Me llevaba donde otros hombres para que me violaran y me golpearan por turnos, mientras él miraba".
"Fue un periodo de ocho años de abusos", detalló Aranda quien precisó que "es un abuso de conciencia, poder y sexuales".
"Lo que más me hace sufrir es que él me obligó a abortar, y no sólo una vez, tres veces", remarcó al noticiero.
El pasado 27 de enero, Marcela Aranda habló por primera vez con la prensa sobre la denuncia contra quien fuera capellán del Hogar de Cristo. En esa oportunidad, la profesional contó que los abusos ocurrieron en entre 1985 y 1993, caso que es investigado por la Iglesia Católica luego de que presentara la denuncia ante el obispo Charles Scicluna.
Producto de esta denuncia, el Gobierno decidió retirar la estatua y la placa alusiva al sacerdote jesuita en el parque urbano que -hasta entonces- llevaba su nombre.