El Presidente Electo Kast en estos 10 días post segunda vuelta, ha buscado instalar la futura impronta de su gobierno.
Por un lado está buscando acotar las expectativas en torno a sus pocas promesas en gestión de la inmigración ilegal, la seguridad en los barrios e impulsar un crecimiento económico mayor al 2,5% de este 2025.
Ha insistido y su equipo más cercano en torno a que será “un gobierno de emergencia” centrado en los focos ya descritos y en otros temas más valóricos -como acuerdo unión civil y aborto tres causales por ejemplo- no tendrá una agenda contrareformista.
La duda es si será un gobierno “ideologizado” promoviendo la batalla cultural como pregonan la ultraderecha extrema o será un gobierno “pragmático” que asumirá los límites de la realidad, como por ejemplo que no cuenta con mayoría clara en el Parlamento, ni en el Senado ni en la Cámara.
Un candidato que sólo obtuvo 24% de la votación en la primera vuelta -aunque haya saltado al 58% en la segunda vuelta- debiera aprender que tiene “votos prestados” de otras coaliciones o partidos que seguirán expresándose en el nuevo Parlamento.
La coalición original del Presidente electo obtuvo un 23% en la elección de diputados y 25% en la de senadores y deberá “negociar” y concordar con Chile Vamos la conformación de un equipo y agenda gubernamental que mantenga la unidad estos 4 años y eso debiera acercarlo a una agenda más pragmática y más acotada, como la tesis del gobierno de emergencia.
Pero la visita a Argentina y su foto con la motosierra y el presidente Milei (y el ofrecimiento de ministerio a José Luis Daza y su cuña de que iba a “aprender” de Milei manejo de inflación y reducción de la pobreza urbana) generaron un conjunto de dudas sobre su opción por el pragmatismo. Pero también se debe reconocer que su reunión con ex Presidenta Bachelet y la visita a la Moneda mostraron un Presidente Electo actuando con sentido de Estado.
Lo que es claro es que requerirá un Comité Político con ministros experimentados, con vínculos con los distintos sectores parlamentarios de su sector -sean Republicanos, PNL, RN, UDI, Demócratas- que además, tengan manejo con la nueva oposición que estará en proceso de re-organización y en evaluación post débil gestión guberamental que explica parte importante de la paliza electoral del 16 de noviembre y del 14 de diciembre y con la bancada PDG en la Cámara de Diputados que puede convertirse en un pivot decisivo en la administración de la Cámara.
Si predomina el pragmatismo político en el nuevo gobierno debiera buscar un acuerdo amplio y transversal tanto para conformar las Comisiones Parlamentarias y las mesas directivas de la Cámara y del Senado con una agenda legislativa que exprese sus prioridades del “gobierno de emergencia”, mostrando -una vez más- que una cosa son las campañas y sus relatos y otra cosa muy diferente es gobernar donde buscarse en el menor tiempo posible cumplir parte de sus promesas y que explican su apoyo electoral.
Eso requiere acuerdos amplios y transversales y no ganar las mesas directivas del Parlamento y sus Comisiones por “1 o 2 votos”; por eso, es preocupante y contradictorio las informaciones de prensa que señalan que las derechas habrían optado en la Cámara negociar con los diputados Mulet y Alinco los que “podrían darles la mayoría -de 78 diputados- para arribar a una mesa directiva que excluya a la izquierda”.
Esta lógica pendular -instalada en el país desde 2010- que explica el actual clima social y político de polarización, división y estancamiento requiere ser superada mediante la reinstalación de la lógica de los Acuerdos transversales, pero si nuevo gobierno opta por tener mayorías débiles, donde se vuelve a la mala práctica del "pirquineo de votos" es no haber aprendido la lección de estos años.
El país para combatir el crimen organizado, para volver a crecer al 4%, para tener mejor salud y educación de calidad requiere acuerdos, diálogo político transparente y lo sensato es que en el Parlamento opte por construir acuerdos amplios tanto para estructurar las Comisiones como sus mesas directivas.
Veremos que camino opta Presidente Electo Kast.
Editorial Cambio21. Los primeros pasos del Presidente Electo
