Por María Cristina Prudant
Patricio Achurra estudió en la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile. Trabajó durante varios años en el mismo lugar. Según su relato, estrenó una obra el 7 de septiembre de 1973; una obra de tres personajes que se llamaba “Los Desterrados” en que actuaban Mónica Carrasco, Tenyson Ferrada y él. “Era una obra bastante política que se ensayó en medio de todas las escaramuzas antes del golpe, precisamente frente a La Moneda en el teatro Antonio Varas”, comenta.
Después de eso, a partir del año 75, empezó a trabajar en televisión, en toda la etapa de las telenovelas de Arturo Moya Grau, previas a “La Madrastra”, que fue un período de formación, de escuela prácticamente, “donde una masa crítica de actores aprendimos a actuar en televisión y cuando llegó “La Madrastra” había un grupo suficientemente preparado para hacer ese trabajo con el nivel que tuvo”.
De ahí en adelante trabajó prácticamente en televisión, también hizo teatro entremedio, pero su trayectoria diría que ha estado en la televisión. "En la actualidad, estoy haciendo, en giras, una obra de Marco Antonio de la Parra con Jaime Azócar que se llama “Amor que me hiciste mal” y se está preparando, a un mes y medio de poder hacer funciones, una nueva obra que se llama “Eramos tan amigos” , es “en el género de comedia , pero una obra que tiene mucho contenido muy actual, que cualquier tipo de público se van a sentir no solo identificados sino que van a reconocer todas las situaciones que la obra plantea y propone”.
El trabajo actual en la TV
Hace tiempo que usted dejó de estar constantemente en televisión como lo veíamos antes. ¿A qué se debe?.
Yo supongo que la mayor cantidad de los personajes atractivos son entre los 25 y los 45 y los personajes de mi edad son menos, en general, en las historias que se cuentan y por supuesto que habiendo menos personajes hay menos oportunidades también. He tenido alguna actividad en televisión, terminé en marzo una telenovela en TVN que se llamaba “Wena Profe” y eso es lo último, pero en general, reitero, hay menos oportunidades y en televisión uno es pasivo.
¿Qué es ser pasivo?
Así como le conté que estoy haciendo teatro ahora y hemos tomado nosotros la iniciativa, teníamos una historia, buscamos un autor que la transformó en texto. En teatro uno toma la iniciativa, en cambio en televisión es pasivo hay que esperar que le ofrezcan algo.
Hay una mentalidad distinta en Chile, porque vemos teleseries brasileñas y las mismas turcas tienen muchos personajes mayores...
Sí, claro, pero lo que pasa en la televisión pasa en general en nuestro país, no es un medio donde se da menos espacio a la gente mayor la televisión, pasa en las empresas, en el Estado, pasa en todas partes. Es una lástima pero no es así, en Argentina, la gente mayor tiene múltiples espacios más de lo que tenemos acá.
¿Está de acuerdo con la línea de las teleseries en la actualidad que usan muchos actores jóvenes, con desnudos?
Lo que pasa es que el 95% de la gente que escribe es muy joven y tengo la impresión que se sienten más cómodos escribiendo historias para gente que es representativa de su edad. Entonces, no tengo un argumento más como para decir no ponen más gente mayor, no porque no haya actores de esa edad, sino porque no encuentran historias que parezcan entretenidas con ese tipo de personajes. Pero sin duda que con personas mayores se pueden hacer historias tan atractivas como las de los jóvenes.
¿Qué le parece lo que ha pasado con Mega que se ha posicionado muy bien con las teleseries turcas? .
Es bien paradojal lo que ocurre en Mega porque le va muy bien con las teleseries chilenas y sin embargo traen muchas de estas turcas y fueron ellos los que partieron con esa decisión. No sé, la verdad que no me lo explico mucho y menos me explico el gusto de la gente de ver esas teleseries turcas porque, están bien hechas, pero son mundos tan distintos, gente que está invocando a Alá todo el tiempo y una cultura tan distinta a la nuestra, pero parece que tiene éxito igual. Me declaro absolutamente incompetente para entenderlo.
El acoso sexual actual
¿Qué le parece estos directores como Herval Abreu y Nicolás López que, según sus denunciantes, abusaban de las actrices?
Me parece asqueroso hacer ese aprovechamiento del poder que tienen en un medio con tan poco espacio, pero bueno parece que eso no importa porque en Estados Unidos hay mucho espacio y hemos visto que los productores y directores abusan de esas condiciones. Despreciable me parece no puedo decir otra cosa. Cualquier espacio donde se abuse del poder me parece horrible.
Yo tuve bastante poder en un momento porque en mi vida tuve una experiencia en el mundo de la política, ejercí un cargo de alcalde que son personas que tienen harto poder y jamás se me pasó por la mente usar ese poder para abusar de nadie. Entonces, es un mecanismo de uso del poder, de abuso de éste que a mi me cuesta mucho entenderlo y mucho menos aceptarlo.
En su larga trayectoria ¿vio casos similares?
Yo creo que eso es algo que siempre debe haber existido porque la especie humana no ha evolucionado tanto desde el comienzo del cine y de la televisión hasta estos días. Pero creo que en todo caso tengo la impresión que antes había mucho menos de eso, de los que nos enteramos que hay hoy. Ahora, yo nunca vi una situación de esa naturaleza que me resultara notoria, de verdad que no. Malos tratos de directores a los actores eso lo ví muchas veces, pero abuso en este plano no.
¿Por qué cree usted que directores relativamente jóvenes han abusado de su poder?
Yo creo que es porque, se me ocurre que deben hacer una pruebita al principio y al ver que lo que reina más bien es la impunidad sienten que tienen libertad para continuar y creo que es una situación de abuso. A una actriz joven que está partiendo que siente que puede tener una oportunidad, que un director empiece a condicionar la oportunidad con favores o que la niña se ponga “tolerante” me parece asqueroso. Creo que la hombría ahí tiene una merma demasiado grande, me avergüenza a mí saber que esas cosas han pasado y seguramente, siguen pasando.
¿ Alguna vez usted fue acosado por alguna actriz o directora?
(risas) No, la verdad que no nunca, mis compañeras han sido muy respetuosas conmigo nunca me han acosado.
No más a la política
Patricio, ¿qué pasó con la política? Usted fue alcalde?
Yo llegué a la política absolutamente de casualidad. No busqué participar en política por lo tanto no estaba preparado para enfrentarme a ese mundo asquerosito y espeso que es el de la política. Lo pasé bastante mal en algunos aspectos, en otros muy bien porque ejercer poder es bastante interesante, es atractivo darse cuenta que uno tiene la capacidad de hacer cosas.
Le pongo un ejemplo: en el período de 4 años que fue alcalde de Paine, gracias a la gestión que hizo mi administración, mi equipo de gente, gestionamos la construcción de 1.500 viviendas sociales en esos cuatro años en mi comuna, cosa que no se había producido nunca antes y creo que difícilmente se volverá a repetir. Eso produce una tremenda satisfacción. Eso sigue estando ahí, pero los entretelones de la política eso de justificar las cosas y decir: oye, estamos en política. Si alguien te traiciona, te da la palabra y después no cumple, la explicación es: estamos en política. Eso a mi nunca me pareció satisfactorio y me fui con un sabor bien amargo y entendiendo que la política es un terreno muy duro, difícil , muy resbaladizo.
¿Pero volvería?
No, por ningún motivo. En la política la palabra no vale. Yo sé que los políticos eso no lo dicen porque siguen estando en eso. Los compromisos son todos relativos y la gente que de verdad está ahí por el servicio público creo que son muy poquitos , contados con los dedos de una mano. Por eso creo que el resultado de la política frustra a todo el resto de la gente. Yo elegí a esta persona por lo que dijo , pero no pasa nada con eso. Por eso creo que hay tanto descontento y frustración. Ahora, creo que equivocadamente las personas dicen no vale la pena ir a votar. Creo que es un error muy grande porque no da lo mismo quien gobierne.