El Tribunal de Garantía de Rancagua sobreseyó a los fiscales Emiliano Arias y Sergio Moya en la querella por amenazas en el marco del caso Caval que Natalia Compagnon presentó el año pasado.

La justicia consideró que los hechos descritos no constituían la comisión de un delito, decisión que fue objetada por el esposo de Compagnon, Sebastián Dávalos.

"Aquí hay una falta de iniciativa por parte de la Fiscalía, que debió, a mi juicio, haber investigado más profundamente", señaló.

En tanto, el abogado de Arias, José Luis Andrés, dijo estar conforme pues "luego de un año de investigación, el Ministerio Público adquirió la convicción de que los hechos planteados por la señora Natalia Compagnon en su querella no constituyen delito".


Por otro lado, la audiencia programada para hoy viernes, en que se zanjaría el sobreseimiento de Arias y Moya respecto a la querella por supuestas filtraciones de antecedentes en esta misma causa, fue postergada para el próximo 28 de junio