En la madrugada de este jueves, en la ciudad de Chillán, región del Ñuble, un carabinero fue asesinado a tiros, tras participar de una persecución por un control policial.
El hecho comenzó en la esquina de Eduardo Ossandón con Pasaje Juan Francisco González. Los uniformados realizaban patrullajes de rutina con los respectivos controles, cuando se acercan a un vehículo, desde el que se bajan los dos ocupantes y comienzan a huir.
En eso estaba el carabinero Breant Rivas, de 23 años, persiguiendo a uno de los involucrados (un menor de 16 años), cuando de pronto aparece un tercero, quien comienza a disparar en repetidas ocasiones, hiriéndolo de gravedad.
El jefe de patrulla llegó hasta el punto del intercambio balístico y comenzó a repeler al atacante, quien finalmente fue abatido y fallecido en el mismo sitio del suceso.
Rivas, soltero y padre de un niño de 2 meses de vida, fue trasladado hasta el hospital Herminda Martín, donde finalmente falleció.