No faltó en redes sociales el parlamentario de derecha que declamó con desesperación que se retirara el embajador de Chile en Francia, en respuesta a la "ofensa" de conceder el asilo diplomático a Palma Salamanca.
El gobierno sí reaccionó y mandó a llamar al embajador, pero de Francia en Chile, porque créalo, a nueve meses de gobierno, aún no se designa un representante nuestro en París.
Craso error de la diplomacia nacional que no tuvo a un representante que al menos advirtiera lo que se venía. Más todavía cuando en su última gira Piñera visitó a Macron, el Mandatario francés e hizo lobby -a pedido de la UDI-, para que se apurara la extradición del exfrentista condenado por asesinar a Jaime Guzmán.
Este "detalle" deja al descubiero además que hasta la fecha no se han designado varios embajadores, como por ejemplo en India y Uruguay, entre otros casos. Súmese a ello el importante número de autoridades nacionales que tampoco han sido designadas.
El Canciller, ¿sabrá de esto?