Por Alejandra García

Dada la connotación del acto realizado en la Escuela Militar de homenaje a Krassnoff, detenido en Punta de Peuco pòr delitos que acumulan más de 650 años, pasó un tanto inadvertido otro acto similar, en este caso, dedicado al ex comisario de la PDI y ex integrante de la CNI, la policia política de Pinochet, Jorge Barraza (foto) quien falleció el 8 de octubre pasado.

El ex comisario, cercano a la UDI, fue procesado en agosto pasado por la ministra Mariela Cifuentes por su participación en calidad de autor en el homicidio del matrimonio formado por Sergio Flores y María Verónica Cienfuegos, ambos militantes de izquierda.  Había sido enviado a Punta Peuco a cumplir su prisión, ni más ni menos, que junto a Krassnoff.

El ex pro hombre de los derechos humanos, recientemente fallecido, Andrés Aylwin, fue el que denunció publicamente que el Comisario Barraza, era un doble agente. Detective y CNI. Incluso lo acusó de pertenecer a una asociación ilícita.

Barraza fue quien descubrió que el Frente Patriótico Manuel Rodríguez estuvo tras el crimen del fundador de la UDI Jaime Guzmán. Según el abogado Cristián Espejo, con quien realizó la investigación paralela de la UDI en el caso Spiniak “siempre quiso probar que la inteligencia de Cuba estaba apoyando las operaciones del Frente y por eso esperó. Desde La Moneda lo frenaron”.

El día del sepelio del ex PDI y de la CNI, llegaron a los funerales una delegación de cadetes y aspirantes a detectives de la institución a rendirle honores.

Lo que está claro es que Barraza estaba siendo procesado por el crimen de dos personas, y la mujer, María Cienfuegos, estaba embarazada.

Tras la molestia e indignación de organismos de derechos humanos, la Policía de Investigaciones hizo una declaración pública en la que señala que a Barraza le correspondía en su calidad de ex oficial jefe que reciba honras fúnebres establecido en el reglamento, pero sin discurso.

La directora del INDH Consuelo Contreras afirmó que "el mensaje que se les está enviando a esos aspirantes es un mensaje de represión, de crimen, de muerte, no es un mensaje que esté destinado a que ellos asuman con valor el cuidado de la seguridad de los ciudadanos y ciudadanas de este país".

En tanto, el ministro del Interior Andrés Chadwick le restó importancia y aseguró que "es una situación completamente distinta a la de la Escuela Militar".