En el norte de Osorno, en la Casa de Ejercicios "Betania", reapareció el obispo Juan Barros, quien mantuvo una reunión con el clero de la zona para analizar la visita del arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y al sacerdote catalán, oficial de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Jordi Bartomeu.

El obispo, quien ha sido cuestionado por encubrimientos de los abusos de Karadima, había estado "desaparecido" desde su regreso del Vaticano, cuando todos los obispos de la Iglesia chilena fueron citados por el Papa Francisco.

Respecto a la visita de Scicluna y Bartomeu, quienes se dice que llegarían el lunes a Osorno, el obispo aseguró que "se ha dicho así, pero la verdad es que no ha aparecido el programa confirmado todavía, pero claro, se ha dicho eso. Así que estamos rezando para que sea un momento muy positivo".

"He estado un tiempo con reposo médico, pero gracias a Dios estoy caminando. Y agradecido de mucha gente que reza y compartiendo este tiempo de dolor, de oración y de esperanza de nuestra iglesia", agregó respecto al período que ha permanecido fuera del escenario público.

Por último, consultado por la posibilidad de que renuncie, aseguró que "ya les he dicho, todos estamos siempre disponibles a las decisiones del Santo Padre"